Adra ultima la aparetura de las galerías de la Fundación de San Andrés y los refugios de la Guerra Civil. Estas infraestructuras se incorporarán a la oferta turística del municipio que, además, recupera parte de su historia.
Se trata de galerías y refugios que discurren bajo la Torre de los Perdigones, la torre de fabricación de perdigones más alta de España a mediados del siglo XIX y que formaban parte de todo el complejo de la fábrica de plomo de San Andrés y que se unían el exterior de la fábrica con la base de la Torre de los Perdigones. Los trabajos de adecuación y puesta en valor están consistiendo en la limpieza de todas las galerías, de unos 80 metros de longitud en total, además se actuará en el suelo, eliminando las barreras arquitectónicas y siendo accesible y se dotará de iluminación en las mismas.
Este nuevo monumento histórico para la ciudad de Adra posee una galería de bóveda de ladrillo, de los años 20, junto con un pozo donde caían los plomos de la Torre de los Perdigones. Unidas a ellas, están otras tres galerías más, del año 1937, que se construyeron como refugios de la Guerra Civil Española.
Será la primera vez que estas galerías y los nuevos refugios se abran al público para que puedan ser visitadas, que se unen a otros monumentos históricos que se han recuperado en los últimos años por el equipo de gobierno abderitano, como la rehabilitación de los Torreones y la muralla del Siglo XVI que hay en el casco urbano de la ciudad, con la restauración íntegra de estos dos monumentos históricos en 2007.
A esto hay que añadir la puesta en valor de los refugios de la Guerra Civil, que se unirán a los que ahora han sido recuperados, los trabajos de excavación y rehabilitación del Cerro de Montecristo, el Arco de las Ánimas, el adoquinado de todo el casco urbano de la ciudad o la actuación del año pasado en el Molino del Lugar, convirtiendo la planta baja del mismo en una sala etnográfica del Museo de Adra gracias a las donaciones de familias y particulares del material de distintos oficios antiguos que se han venido desarrollando en la ciudad de Adra durante muchos años.
Todo ello, unido al Museo de Adra y el Centro de Interpretación de la Pesca, hacen de Adra un municipio muy rico en patrimonio histórico y cultural, que el equipo de gobierno ha ido rehabilitando, conservando y poniendo en valor en los últimos diez años, consiguiendo así ser un pilar fundamental para el sector turístico de la ciudad.