Celtas Cortos, la Orquesta Strada, el Septeto Santiaguero y María La Rabota han sido las propuestas para este fin de semana del festival Alamar, que continúa dejando músicas del mundo en Almería hasta el próximo sábado.
“Como ha pasado el tiempo y te ha sentado tan bien”. Es uno de los versos que componen la canción de la banda vallisoletana ‘Hay Que Volver’. Un tema que no sonó ayer entre las casi veinte canciones del repertorio, pero cuya frase define muy bien la propia situación y estado de forma de Celtas Cortos. ‘Retales De Una Vida’, parafraseando otro tema suyo, que sí que sonó. Y es que la formación que lidera Jesús Cifuentes es de esos referentes silenciosos que, pasados los años de euforia mediática, continúan su senda en el tiempo a base de hacer sonreír con la integración de melodías celtas en sus canciones, llenas de rock y distorsión accesible, pero también con ciertas dosis de sonido acústico, de poso en el tempo y de una actitud filosófica siempre en la búsqueda de una sociedad mejor.
La Plaza Vieja de la capital, de esta forma, registró un lleno absoluto para ver uno de los conciertos estrella de esta exitosa edición de Alamar 2014, ‘el Festival del Milenio’, puesto en marcha por el Área de Cultura del Ayuntamiento de la capital. Y además con una diversidad absoluta en cuanto a la tipología de públicos. Jóvenes ávidos de rock y diversión, padres con sus hijos más pequeños a los que inculcar las bondades de la música en directo y mayores que se divirtieron con esas piezas instrumentales tan llenas de vida que Celtas Cortos saben dinamizar como nadie. Aunque también persiste el brillo en la voz de Cifuentes. Casi treinta años después su timbre sigue siendo inconfundible e imperturbable. Quizá las canciones no le piden grandes excesos, pero su ejecución vocal es infalible.
El mismo viernes también se pudo disfrutar con la música de la Orquesta di la Strada, una formación que ofreció un recorrido por la música clásica, a la que aportaron un toque de frescura y cercanía.
Orquesta di la Strada es un conjunto de catorce jóvenes músicos, que se conocieron en la Orquesta Joven de Andalucía. Tras más de 10 años de formación en común y posteriores vivencias y estudios en las principales universidades y conservatorios de España y Europa, irrumpen en el panorama artístico mostrando una visión renovada de la música clásica.
Y lo hacen con una puesta en escena atractiva, la fusión de instrumentos de cuerda y viento, guitarra, percusión y baile flamenco, imagen actual, partituras reconocibles por los asistentes menos habituales a la ‘clásica’ y mucha pasión por compartir noventa minutos de buena música.
Los almerienses y turistas de todas las edades que se acercaron al concierto terminaron acompañando al ritmo de los aplausos a la Orquesta di la Strada, mientras los músicos, casi ya bailando, interpretaban la animada ‘Marcha Turca’ de Mozart.
El sábado, Alamar centró su mirada en Cuba, la música del Septeto Santiaguero. “Vamos a gozar. No quiero veros sentados. Todos a bailar”. Esta frase del cantante Chencho Heredia, al terminar el primer tema, dejó a las claras el espíritu del Septeto Santiaguero, un afamado grupo de música tradicional cubana, con excelente reputación, ganador de importantes premios, y que en Alamar2014 derrochó anoche calidad musical, ritmo y alegría, para disfrute de los almerienses y turistas que, una vez más, volvieron a llenar la Plaza Vieja. El título de su último disco, el séptico de su carrera, denominado ‘Vamos Pa’ La Fiesta’ expresa el sentir de este grupo de cubanos.
Y, tras un pequeño descanso, más música de raíz, en esta ocasión, el baile auténtico flamenco, puro de La Chanca, de la mano de la bailaora María La Rabota.