Pedro Cerezo y Juan Carlos Rodríguez han sido investidos como doctores honoris causa por la Universidad de Almería. Con sendos discursos en los que ambos han hecho referencia a “El Quijote”, el filósofo Pedro Cerezo y el filólogo y escritor Juan Carlos Rodríguez, el primero catedrático de Historia de la Filosofía de la Universidad de Granada, y el segundo catedrático de Sociología de la Literatura y de la Cultura en la Facultad de Filosofía y Letras de la misma universidad, han recibido, en un acto solemne presidido por el rector de la Universidad de Almería, Pedro Molina, la máxima distinción honorífica que se concede en la universidad española: el Doctorado Honoris Causa.
Un reconocimiento que, como señalaba Molina en su discurso, viene a mostrar la gratitud de la comunidad universitaria hacia quienes “se echaron a la espalda el destino” de la universidad, de la formación de los jóvenes profesionales que, en número creciente, acudían a las aulas, facultades y seminarios “en demanda de un pan espiritual, tan necesario como el alimento, en una época muy difícil pero llena de expectativas en relación con un futuro que, como el nuestro, tiene que ser forzosamente mejor”.
Ambos se han distinguido en su trayectoria profesional y docente por la atención a los grandes autores del pensamiento y la literatura, entre otros muchos, Machado, Unamuno, Ortega y Gasset, en el caso del profesor Cerezo Galán, o Cervantes, Lorca, Borges, en el caso del profesor Rodríguez Gómez, tomándolos como “norma” y “modelo”.
“Dar las gracias a Pedro Cerezo Galán y a Juan Carlos Rodríguez Gómez, que nos honran con haber aceptado este honor para la Universidad de Almería. Que formen parte extraordinaria del claustro de la Universidad”. Estas son las declaraciones en las que el rector del la Universidad de Almería mostraba su agradecimiento a los dos Doctores Honoris Causa, posteriormente hará hincapié en la importancia de que estos dos Honoris Causa hayan sido en este caso del Departamento de Humanidades, con dos personas pioneras en su tiempo.
“He venido con mucha frecuencia y me he sentido muy identificado con esta Universidad, esta Universidad hija de la de Granada reclamó su independencia como era debido. Pero sus relaciones con Granada están r reconocidas por esta Universidad y nosotros nos sentimos como representantes de todos aquellos compañeros de la Universidad de Granada que enseñaron aquí, que enseñaron en los comienzos y que han dejado una huella extraordinaria”. Así nos comentaba el Doctor Honoris Causa Pedro Cerezo Galán su contacto directo con la Universidad de Almería.
Por otro lado, Juan Carlos Rodríguez en el Discurso del Acto de Investidura, nos señalaba las dificultades de dar una clase en las aulas de la Unversidad. De entre todas las dificultades destaca que la que hay que tener en cuenta es “alcanzar el tono” desde el principio.
“El cómo comenzar es lo que atosiga: si atrapas al público desde el inicio, luego ya todo resulta fácil. Si no lo atrapas estás perdido”. Estas son las humildes palabras que utiliza Juan Carlos Rodríguez como Doctor en Filología Románica, “lo que ocurre es que el Grado de Filología Románica no existe ya en ninguna universidad española, y por lo tanto resulta que ahora soy un doctor en lo inexistente”.
Cuando accedió a la Cátedra de Literatura, ya en la nueva Facultad granadina, lo hizo bajo el perfil de Sociología de la Literatura. Y sucedió algo muy similar: es asignatura ha desaparecido ya, “al menos en mi Departamento, salvo como una asignatura optativa sin docencia”. Mencionó esta curiosa paradoja mostrándonos los graves problemas que sufren algunas Universidades Públicas de España, sobre todo en lo que se refiere a los estudios humanísticos.
“Para mí este acto es un gran día de fiesta: la culminación sin duda de toda una vida dedicada a la Universidad, a la investigación y a la enseñanza”. Es que cuando el reconocimiento llega de la propia casa, el agradecimiento es mucho más emotivo, si cabe. Por ello que posteriormente: “Y no quiero dejar de agradecer igualmente la ayuda que siempre me han prestado y me siguen prestando los amigos y amigas de la Universidad de Almería, y del mismo modo la de los que han venido “de fuera”.
El profesor Cerezo Galán, junto a otros, como los también profesores Navarro Cordón (presente hoy en el acto de investidura de los nuevos Honoris Causa) o los profesores Valls Plana y Bello Reguera, ya desaparecidos, fueron los responsables de la institucionalización de la filosofía en la universidad española, como destacaba en la laudatio de Pedro Cerezo su padrino en esta ceremonia, el profesor Cayetano Aranda, catedrático de Filosofía de la UAL. “Acometió una singular cruzada intelectual, consistente en el estudio crítico y desapasionado, riguroso y comprensivo, interesado e imparcial, de los autores y obras que han pasado a constituir el canon de nuestras humanidades contemporáneas”, decía Aranda. Ese estudio y sus reflexiones posteriores sitúan a Cerezo como uno de los más destacados pensadores de la España actual.
Este mediodía, en su discurso de investidura, el profesor Cerezo Galán señalaba que su mayor aportación a la Universidad de Almería no estaba en su obra académica, sino en haber contribuido “en alguna medida” a la formación de los profesionales que imparten docencia en este campus. Cerezo ha disertado en su intervención sobre filosofía y también sobre ensayo y novela, una “doble vía de pensamiento experimental, a veces cruzada y entreverada” en la que, decía, se ha ido perfilando el “yo moderno” en cuanto experimentador del mundo “en los modos posibles de existir en él”.
El otro Honoris Causa investido esta mañana, el profesor Juan Carlos Rodríguez, ha tenido desde hace décadas una relación “ininterrumpida” y “fructífera” con la Universidad de Almería. Participó desde el nacimiento del Colegio Universitario de Almería en la creación del Departamento de Filología, y fue maestro, igualmente, tanto de quienes ejercen actualmente la docencia en el área de Didáctica de la Lengua y la Literatura en esta provincia, como de buen número de catedráticos de Lengua y Literatura de los institutos de Secundaria de Almería.
Asimismo, ha dirigido diversas tesis doctorales al profesorado de esta universidad y ha impartido cursos de verano o conferencias. La última colaboración ha sido la publicación, en la colección Ordo Academicus, del volumen “Formas de leer a Borges (o las trampas de la lectura)”. En el mismo, el profesor Rodríguez propone una serie de lecturas sobre la obra de Borges con las que culmina la atención prestada a lo largo de su vida académica a la literatura del otro lado del Atlántico. Anteriormente, en su monografía “Introducción al estudio de la literatura hispanoamericana”, Juan Carlos Rodríguez había manifestado ya la pasión por aquellas literaturas que llegaron para echar raíces en nuestros departamentos de literatura española, como apuntaba hoy su padrino en el acto, el catedrático de Literatura de la UAL Gabriel Núñez.
Recordaba Núñez en su discurso que el gran mérito de Rodríguez no fue plantear a sus alumnos cuestiones sobre la “misión” del discurso ideológico, “sino hacerlo en un país en que incluso hablar de libertad o de democracia era un atrevimiento, pues ambos son sustantivos todavía prohibidos”.
Juan Carlos Rodríguez arrancaba su alocución señalando que para él, este acto es “un gran día fiesta”: la culminación de “toda una vida” dedicada a la Universidad, a la investigación y a la enseñanza. En su disertación, el profesor Rodríguez ha hablado extensamente sobre “El Quijote”, que ha definido como “el libro que más he amado”. “Don Quijote lo que hace es enfrentar su sentido del mundo al nuevo sentido del mundo establecido. Pero ¿cómo lo hace? Dando dos pasos atrás y un paso adelante. Dos pasos atrás porque vuelve al mundo de sus abuelos, recupera una memoria perdida y en ese aspecto parece olvidar el presente. Pero no lo olvida en absoluto. Muy al contrario, el nuevo presente (la nueva memoria del presente) es lo que le permite dar el salto hacia delante. El nuevo presente, donde ya está el primer capitalismo, necesita la libertad y Don Quijote se encuentra con la libertad y la asume como nadie”, ha expuesto.
Curriculum de los nuevos Honoris Causa
Pedro Cerezo Galán, uno de los más destacados filósofos españoles, nació en Hinojosa del Duque (Córdoba) el 14 de febrero de 1935. Es catedrático de Historia de la Filosofía de la Universidad de Granada, y con anterioridad lo fue de la Universidad central de Barcelona.
Entre sus responsabilidades académicas, cabe destacar que fue decano de la Facultad de Filosofía de Granada, vicepresidente de la Sociedad Nacional de Filosofía y miembro de la comisión asesora de la Fundación “Juan March”. Es miembro de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, del Club de Roma y del Patronato María Zambrano.
Es especialista en Historia de la filosofía moderna y contemporánea, en la que ha trabajado especialmente el pensamiento de Hegel y la izquierda hegeliana, así como la Fenomenología y la Hermenéutica. Es igualmente especialista de reconocido prestigio internacional en la historia del pensamiento español (Ortega y Gasset, Unamuno, Zubiri, María Zambrano, Antonio Machado) al que ha dedicado estudios fundamentales. Su producción científica está compuesta por más de 60 libros, diversos artículos en publicaciones relacionadas con la filosofía y las letras. Además, ha participado en centenares de congresos y conferencias.
Entre sus principales publicaciones, destacan “Arte, verdad y ser en Heidegger” (Madrid, 1960); “Teoría y praxis en Hegel” (Universidad de Granada, 1976); “Palabra en el tiempo: Poesía y filosofía en Antonio Machado” (Gredos, Madrid, 1975); “La voluntad de aventura: Aproximaciones críticas al pensamiento de Ortega y Gasset” (Ariel, Barcelona, 1984); “De la generación trágica a la generación clásica: el pensamiento filosófico de las generaciones de 1898 y 1914” (en “La Edad de Plata de la cultura española”, tomo XXXIX de la Historia de España de R. Menéndez Pidal. Espasa-Calpe, Madrid, 1993); “Las máscaras de lo trágico: Filosofía y tragedia en Miguel de Unamuno” (Trotta, Madrid, 1996); “El mal del siglo. El conflicto entre Ilustración y Romanticismo en la crisis finisecular del siglo XIX” (Universidad de Granada, 2004) y “Ortega en perspectiva” (Instituto de España, 2007). En 2004 obtuvo el Premio Ortega y Gasset de Ensayo y Humanidades de la Villa de Madrid y en2008, el Premio de Investigación “Ibn al Jatib” de la Junta de Andalucía.
Por su parte, Juan Carlos Rodríguez, es catedrático de la Universidad de Granada y profesor emérito de literatura y pensamiento del Renacimiento y Barroco. Nacido en Vitoria el 15 de julio de 1942, Rodríguez realizó sus estudios superiores en la Universidad de Granada, donde es catedrático de Sociología de la Literatura y de la Cultura en la Facultad de Filosofía y Letras. Durante la década de los años 70 trabajó con Louis Althusser en la Ecole Normale Supérieure de París y posteriormente fue profesor invitado en diversas universidades españolas y extranjeras, especialmente en la Universidad de Stony Brook, en Nueva York. También realizó estancias en las Universidades de Duke (Carolina del Norte) y “La Sapienza” de Roma. Dirigió la Cátedra Federico García Lorca, del Vicerrectorado de Extensión Universitaria de la Universidad de Granada entre 2001 y 2008.
Fue ganador del Premio Janés de ensayo literario con el libro “El escritor que compró su propio libro”. Rodríguez se ha dedicado sobre todo al estudio de la literatura española y europea del Siglo de Oro, a la literatura hispanoamericana y al análisis de la cultura posmoderna.
Ha dedicado además ensayos a la literatura gallega a través de Castelao y a la literatura catalana a partir de Ausias March. En sus numerosos libros de ensayo, el nuevo Honoris Causa de la Universidad de Almería ha tratado de investigar las relaciones entre literatura, ideología y filosofía en conexión con la hegemonía en el interior de las prácticas sociales.
Entre sus múltiples publicaciones destacan “Teoría e historia de la producción ideológica. Las primeras literaturas burguesas” (1974, 1990), “La norma literaria” (1984, 2001), “Introducción al estudio de la literatura hispanoamericana” (junto con Álvaro Salvador) (1987), “Lorca y el sentido” (1994), “Dichos y escritos” (1999), “La literatura del pobre” (2001), “Brecht siglo XX” (coord.) (1999), “De qué hablamos cuando hablamos de literatura” (2002), “El escritor que compró su propio libro. Para leer El Quijote”, (2003), “Althusser: Blow-up” (2003), “Literatura, moda y erotismo” (2003), “Pensar/leer históricamente. Entre el cine y la literatura” (2005), “Para una lectura de Heidegger” (2011), “Tras la muerte del aura (En contra y a favor de la ilustración)” (2011), “Formas de leer a Borges” (2013).