Excepcional el trabajo de los actores Agustín Jiménez y Antonio Garrido en la comedia ‘Una boda feliz’ que se representó el sábado en el Teatro Auditorio de Roquetas de Mar. ‘Una boda feliz’ era una versión de la comedia francesa Le gai mariage, de Gerard Bitton y Michel Muñiz, que ha sido adaptada al español por el cómico Juan Solo. La obra era una comedia de equívocos en la que, como en el engranaje de un reloj, las piezas se fueron ensamblando de una manera ágil creando situaciones que provocaron la risa del público. Los ingredientes eran cinco personajes bien diferenciados que ocultaban más de lo que mostraban.
El reparto lo completaron Antonio Garrido, Francesc Albiol, Celine Tyll y Juan Solo.
La obra se centraba en el personaje de Enrique, un soltero empedernido que va a heredar de una lejana tía. Pero para poder acceder a la herencia ella le ha impuesto la condición de que se case en el plazo de un año con la intención de que siente cabeza de una vez.
Como él no quiere renunciar a su vida de mujeriego, le propone a su mejor amigo, Lolo, casarse con él y así cubrir el expediente. Ese matrimonio de conveniencia, para lo bueno y para lo malo, se convierte en una pesadilla.
