La Junta de Andalucía impulsa este año la renovación y ampliación de la red de comunicación RICA, lo que permitirá aumentar el ancho de banda de 10 a 100 gigabits.
Los usuarios domésticos, las empresas o las administraciones utilizan para el desempeño online de sus actividades y servicios la versión convencional de internet, desplegada y gestionada por los grandes operadores de telefonía. Pero al margen de esa red comercial existe una infraestructura de comunicación de alta capacidad, más avanzada, veloz y potente en la que la información viaja no en megabits sino en gigabits y cuyo acceso está restringido al público en general. Este ‘super internet’ solo puede ser usado por la comunidad científica y académica andaluza.
Se llama RICA, el acrónimo de Red Informática Científica de Andalucía, y a través de un mallado de 3.100 kilómetros de fibra óptica y diez nodos o Puntos de Presencia (PdP) interconecta a las diez universidades públicas y a 45 centros y organismos también de naturaleza pública que desarrollan su labor en el territorio andaluz.
Gracias a ese despliegue y cobertura del mapa regional, con PdP en todas las provincias, sus miembros disponen de la conectividad avanzada y servicios de red necesarios para llevar a cabo su trabajo y colaborar entre ellos de forma remota.
RICA y los servicios que se prestan a través de ella son coordinados y gestionados por la Consejería de Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades, mediante el Centro Informático Científico de Andalucía (CICA), concebido para prestar servicios al sistema regional del conocimiento. Su relevancia actual resulta esencial para el impulso de la innovación en el ámbito académico y científico y para el desarrollo de la e-Ciencia en la comunidad.
Esta actualización permitirá multiplicar por hasta diez el ancho de banda del que disponen actualmente las universidades y centros de investigación, ya que la malla informática pasará de interfaces de conexión de diez gigabits por segundo, escalables hasta 40, a contar con una capacidad de hasta 100 gigabits por segundo.
De ello se beneficiarán los 2.129 grupos de investigación adscritos a las instituciones académicas e infraestructuras de investigación tan relevantes y singulares como el Instituto de Astrofísica de Andalucía, con sede en Granada, o el Observatorio Calar Alto, en Almería; así como los centros del CSIC. Todos estos agentes se encuentran a la vanguardia del conocimiento y tratan de dar respuesta a desafíos científicos claves para el progreso de la sociedad andaluza.
La inversión total para ejecutar la intervención se ha estimado en más de 2,4 millones de euros, que se financiarán en su totalidad con los Fondos Next Generation procedentes de la Unión Europea. La Consejería aportará, además, todo el trabajo técnico que será necesario realizar para culminar con éxito la renovación y ampliación de la infraestructura científica.
La estructura andaluza está diseñada con dos salidas al exterior, lo que posibilita su unión con la RedIRIS-NOVA estatal -la evolución de RedIRIS- y, gracias a esa interconexión, puede entrar en contacto con el resto de redes académicas y de investigación de los demás países europeos y con la paneuropea GÉANT. Incluso, esa relación supera la frontera europea y permite la colaboración con grupos de investigación de EEUU, Canadá o Japón y países de América Latina, Asia o África.