El gasto en I+D en Andalucía alcanzó los 1.627,2 millones de euros en 2020, lo que supone un 5,8% más respecto al año anterior, el mayor incremento en la última década. Esta cifra coloca a la región en tercera posición a nivel nacional solo por detrás de Madrid (4.253M€) y Cataluña (3.619M€).
Dicha subida es la mayor de las registradas en el conjunto de las regiones españolas, seguida por Murcia, con un 5,5%, y por la Comunidad de Madrid, con un 3,7%. El incremento medio nacional se ha situado en el 1,3%, 4,5 puntos por debajo de la evolución andaluza.
Así se recoge en el informe sobre ‘Actividades de I+D en Andalucía 2020’, elaborado por la Consejería de Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidad a través de la Agencia Andaluza del Conocimiento (AAC) a partir de los datos publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
El incremento registrado en 2020 mejora en casi dos puntos la evolución positiva cosechada también en 2019, cuando el gasto en I+D ascendió un 4%. Se trata, por tanto, de dos años consecutivos de subidas.
Asimismo, en la actual legislatura, tomando como referencia los años 2019 y 2020, el gasto medio anual en I+D ha sido de 1.582,8 millones de euros, mientras que en la etapa anterior, entre 2015 y 2018, este parámetro se situó en 1.434,6 millones, lo que implica 148 millones anuales de media más.
Ese mejor comportamiento observado está sustentado, en gran medida, en el compromiso del Ejecutivo autonómico de reforzar y reactivar el sistema andaluz del conocimiento, después de casi una década en la que se han producido importantes caídas en el gasto en I+D, las más relevantes los descensos del 10,19% en 2012 y del 7,90% sufrido en 2016.
La Consejería de Transformación Económica ha inyectado a la I+D+I andaluza, desde el inicio de la legislatura hasta la actualidad, un montante de 308 millones de euros, a través de diversos programas de apoyo a la carrera investigadora, de impulso a proyectos de investigación y a la transferencia de conocimiento, o de fomento de los Campus de Excelencia Internacional existentes en la comunidad, entre otros.
Sector público, tractor de la inversión regional en I+D
Un año más, en Andalucía el esfuerzo inversor en investigación y desarrollo procede, mayoritariamente, del sector público (administración pública y enseñanza superior), que continúa actuando como activo tractor de la inversión regional en I+D. Aporta el 63,53% de los recursos invertidos, lo que equivale a 1.033,7millones de euros, frente al 36,47% del ámbito privado, esto es 593,5 millones, que engloba a empresas e instituciones privadas sin fines de lucro (IPSFL).
Además, este esfuerzo inversor por parte del sector público se incrementó el pasado ejercicio un 5,87%, lo que supone la mayor subida de la última década. La anterior se produjo en 2019, por lo que los dos mayores crecimientos en este ámbito se han dado en la actual legislatura.
Por sectores diferenciados, en 2020 la inversión regional en I+D la encabeza en la comunidad el sector de la enseñanza superior (universidades y organismos públicos de investigación), con 728 millones y el 44,7% del total del gasto. Les siguen las empresas, con 590 millones (36,3%); las administraciones públicas, con 306 millones (18,8%); y, por último, las IPSFL con 3,3 millones (0,2%).
En general, el gasto en investigación y desarrollo se ha incrementado en todos los sectores: un 7,28% en la enseñanza superior; un 5,61%, en las empresas, un 4,77% en las IPSFL y un 2,68%, en la administración pública.
Recursos humanos de I+D
En relación con el potencial humano en materia de investigación, Andalucía sigue siendo la tercera región con mayor número de personas dedicadas a actividades de I+D, alcanzando las 25.908 (EJC*) entre investigadores y personal técnico y auxiliar. Este indicador se ha visto incrementado en 2020 respecto al año anterior un 4,17% y supone el 11,18% del volumen total de investigadores en España.
La mayoría de este personal desempeña su labor en el sector público (68,63%), esencialmente en la universidad, y el resto, el 31,37%, en el sector privado. Cabe destacar una tendencia ascendente en los últimos años de aquellos investigadores vinculados al ámbito privado, con un incremento interanual del 5,8%.
Brecha de género
En Andalucía, el personal de I+D masculino supone el 59,44% con un total de 15.399 investigadores, mientras que el femenino representa el 40,56% (10.509). Éste último únicamente supera al masculino en la administración pública, con un 52,1% de mujeres (2.976) frente al 47,9% de hombres (2.739).
En contraposición, en el sector privado (empresas e IPSFL) solo el 29% de las personas dedicadas a I+D son mujeres, poniendo de relieve la necesidad de mejorar las políticas de estímulo para alcanzar la igualdad de oportunidades en este sector.