Artículo de
Gracia María Sánchez Pérez
Investigadora de SexLab, del Centro de Investigación Mente, Cerebro y Comportamiento de la Universidad de Granada
El trastorno orgásmico femenino se caracteriza por la ausencia, retraso o infrecuencia marcada del orgasmo, o la reducción de la intensidad de las sensaciones orgásmicas en más del 75% de las actividades sexuales. Aunque los datos varían de unos estudios a otros, se trata de una disfunción sexual que afecta a un número importante de mujeres, estimándose que un 10% de ellas no experimenta un orgasmo en su vida.
Afecta de forma negativa a la calidad de vida de las mujeres, relacionándose con insatisfacción sexual, disminución de la autoeficacia sexual, así como con anhedonia y evitación de las relaciones sexuales, pudiendo perturbar también a la calidad de la relación de pareja.
Cómo tratar el trastorno orgásmico en mujeres
Una de las técnicas desarrolladas para tratar el trastorno orgásmico en mujeres es la alineación coital. Se trata de una postura sexual en la que la pelvis del hombre estimula de manera lenta y rítmica el clítoris de su pareja durante el coito, permitiendo una estimulación directa de este.
Un reciente estudio, publicado en Revista de Psicoterapia por Carmen Mata Muñoz, Gracia María Sánchez-Pérez, Laura Elvira Muñoz-García y Juan Carlos Sierra, comprobó la eficacia de la técnica de alineación coital aplicada en línea, comparándola con un entrenamiento en masturbación y un grupo control en lista de espera. Cincuenta mujeres diagnosticadas con trastorno orgásmico femenino fueron distribuidas al azar entre los tres grupos, evaluándoles antes y después del tratamiento la erotofilia, las actitudes hacia la masturbación, las actitudes hacia las fantasías sexuales, la asertividad sexual, el funcionamiento sexual, la satisfacción sexual y la satisfacción con la relación de pareja.
Los resultados reflejaron que, tanto la técnica de alineación coital como la masturbación son eficaces en el tratamiento del trastorno orgásmico femenino, en comparación con el grupo de lista de espera. La técnica de alineación coital presentó resultados ligeramente superiores en el funcionamiento sexual global y en su componente de satisfacción, mientras que la masturbación fue ligeramente superior en medidas más específicas del orgasmo.
Psicología o fármacos
Los tratamientos psicológicos presentan ventajas sobre la terapia farmacológica, ya que no tienen efectos secundarios físicos y pueden restablecer el funcionamiento sexual e incrementar la satisfacción sexual más allá de una simple reducción de la sintomatología. La terapia sexual busca promover cambios en las actitudes y creencias, reducir los niveles de ansiedad y depresión, potenciar la comunicación y mejorar la respuesta sexual.
Se concluye que, aunque la masturbación sigue siendo una técnica relevante en el tratamiento orgásmico femenino, la alineación coital puede ser una opción eficaz que merece más atención en la terapia sexual.