Una constitución para la Tierra, la clave para la supervivencia de la humanidad

La protección jurídica llega a todos los ámbitos de la sociedad, sin embargo, no tanto a la protección del planeta, una necesidad que se plantea como urgente por algunos especialistas, para protegerse frente al cambio global que se ha iniciado. Uno de los especialistas que defienden esta protección de la Tierra es el filósofo y jurista italiano, Luigi Ferrajoli, que está convencido de que “solo un  constitucionalismo global puede asegurar la supervivencia de la humanidad”.

Un embalse en estado crítico a causa de la sequía.

Este planteamiento es protagonista en su libro Por una Constitución de la Tierra. La humanidad en la encrucijada, que se presenta el próximo lunes 23 de octubre, a partir de las 17:30 horas, en el salón de grados de la Facultad de Derecho de la Universidad de Alicante.

Por qué se necesita una constitución para la Tierra

Portada del libro ‘Por una Constitución para la Tierra’.

Luigi Ferrajoli explica que se necesita una constitución para la Tierra porque existen problemas globales que no forman parte de la agenda política de los gobiernos nacionales, aunque de su solución dependa la supervivencia de la humanidad: el calentamiento global, las amenazas a la paz mundial, el crecimiento de las desigualdades, la muerte de millones de personas todos los años por falta de agua potable, de alimentación básica y de fármacos esenciales o las masas de migrantes que huyen de las condiciones de miseria y degradación de sus países.

Como se señala en la obra de Ferrajoli, estas tragedias no pueden ser vistas como meros fenómenos naturales o simples injusticias. Por el contrario, constituyen violaciones masivas de los derechos fundamentales estipulados en las diversas cartas constitucionales vigentes, tanto nacionales como supranacionales. La humanidad se encuentra hoy ante una encrucijada de la historia, seguramente la más dramática y decisiva: sufrir y sucumbir a las múltiples catástrofes y emergencias globales, o bien hacerles frente, oponiéndoles la construcción de idóneas garantías constitucionales a escala planetaria, proyectadas por la razón jurídica y política.

Cómo contribuiría a garantizar los derechos humanos

Solo una Constitución de la Tierra que introduzca un dominio planetario para la tutela de los bienes vitales de la naturaleza, prohíba todas las armas como bienes ilícitos, comenzando por las nucleares, e introduzca un fisco e instituciones idóneas globales de garantía en defensa de los derechos de libertad y en actuación de los derechos sociales puede realizar el universalismo de los derechos humanos.

Ferrajoli hace suya la idea de Kant conforme a la cual, sin la esperanza de tiempos mejores no habría espacio para la moral y para la política, negándose a aceptar la tesis del realismo ramplón, según la cual no hay alternativas y tenemos que considerar que éste es el único de los mundos posibles. Pero hay alternativas. La política es la construcción del futuro, que se basa, precisamente, en que es posible un mundo diferente. El proyecto de una Constitución de la Tierra no es una hipótesis utópica, sino la única respuesta racional y realista capaz de limitar los poderes salvajes de los estados y los mercados en beneficio de la habitabilidad del planeta y de la supervivencia de la humanidad.  

Luigi Ferrajoli.

Quién es Luigi Ferrajoli

El jurista italiano Luigi Ferrajoli (Florencia, 1940), profesor emérito de Filosofía del Derecho de la Università Roma III, es exmagistrado, filósofo y activista de los derechos humanos. Sus trabajos de Filosofía política y jurídica han tenido una enorme repercusión en el mundo latino, donde se le considera uno de los filósofos del Derecho más reputados del último medio siglo.

En reconocimiento a su trayectoria como jurista, ha recibido casi una cincuentena de doctorados honoris causa.