Tribuna – » No basta solo con decir que cumples» por Enrique Herrero, candidato a rector de la UA

Artículo de
Enrique Herrero
Candidato a rector de la Universidad de Alicante.

El pasado martes pudimos ver todos a Amparo Navarro, exrectora de la Universidad de Alicante y candidata a las próximas elecciones, junto a su equipo en pleno centro de Alicante, presentar a los medios de comunicación una web donde, según ella, rinden cuentas de su mandato a través de porcentajes, desgranando uno por uno todos sus logros. Tal y como ella dijo, es cierto que es la primera vez que se hace algo así, pero, para ser la primera vez, todos los datos distribuidos en diferentes áreas de trabajo superarían mayoritariamente el 70% del porcentaje realizado, lo cual resulta «curiosamente» llamativo.

Es cierto que puedes decir que cumples con un gran número de tus promesas electorales, o al menos parecerlo, pero es que cumplir algo es lo mínimo. Sinceramente, alardear de haber realizado la mayoría de tus propuestas, resaltando que cumples con hechos y no con palabras, no debería ser algo tan reseñable con lo que sacar pecho públicamente, ya que, si alguien promete algo, lo normal es que lo haga, y más si lo marca la ley.

Con esto me refiero, por ejemplo, a que si de todas las promesas hechas por Amparo al Personal Docente e Investigador (PDI) sobre su dedicación docente solo ha conseguido realizar y ejecutar las que han estado obligadas por la legislación, pues donde ella ve un porcentaje de éxito, yo lo definiría como que haces lo que por fuerza mayor tenías que hacer, que es realizar tu trabajo. Y eso es lo mínimo, así que lo ideal sería que Amparo y su equipo no se atribuyeran como propio lo que la ley les ha obligado a hacer. 

Pero también es destacable, por el contrario, que hay cosas que por ley no se pueden hacer, como en el caso de su promesa electoral al PTGAS, a los que se les prometió «Recuperar las reducciones de dedicación a partir de los 60 años« cuando sabían que no era legal y que tenían todos los informes legales en contra. Aun sabiéndolo, lo prometieron. Y en esta rendición de cuentas lo definen de tal manera que ya no les compromete a nada, pero se lo apuntan como un tanto a su favor.

En resumen, Amparo presentó una página web llena de números de interés electoralista extraídos mediante una más que dudosa metodología que no describe los criterios y no está documentada, como era de esperar para una representante académica. A esa web, que poco a poco iré desgranando a través de diversos canales con la finalidad de ir descubriendo su verdadero resultado, solo puedo darle la razón en una cosa: Ellos son los que pueden hablar de «hechos» porque han sido los que han dirigido la universidad estos últimos años y les corresponde ese papel.

Al resto, a los que aspiramos a poder hacer realidad nuestras promesas algún día, solo nos queda la opción de hablar de propuestas, exactamente 100, las que he desarrollado en un programa y que, a lo largo de las próximas semanas os iré desvelando. Porque la UA no necesita escuchar que lo que se ha prometido se cumple mediante números a la carta, sino que necesita más responsabilidad y honestidad con la comunidad universitaria, necesita un mensaje mucho más inspirador, una apuesta por un mensaje de futuro, transformación, desarrollo e innovación. La Universidad de Alicante necesita mucho más que decir que algunas cosas se cumplen.