En la lucha contra el cáncer se están probando todo tipo de tratamientos. Uno de los más sorprendentes consiste en someter el tumor a una sesión de ultrasonidos, que recientemente ha probado un equipo de científicas del CSIC, con el que se han logrado resultados prometedores y se presenta con una fórmula con posibilidades para implantarse como tratamiento habitual de esta enfermedad.
El experimento se ha realizado con células de cáncer de páncreas, y los resultados ha sido publicados en una revista internacional. Sus responsables, del centro ITEFI-CSIC, consideran que este tratamiento resulta ventajoso, porque no es nada invasivo y con él se logra parar el tumor.
Qué se ha conseguido con el tratamiento del cáncer de páncreas con ultrasonidos
En el estudio se ha logrado inhibir procesos de migración de células cancerosas in vitro, mediante radiación de baja intensidad con ultrasonidos, una práctica con la que se eliminan las células responsables del tumor, mientras que las sanas no sufren ningún tipo de daño. Se abre una ventana muy interesante a tratamientos sin los temidos efectos secundarios de la quimio y radioterapia.
El crecimiento de los tumores sólidos va acompañado de procesos de proliferación y migración de las células cancerosas. Las terapias actuales que incluyen radiación ionizante destruyen células malignas y sanas. “Nuestra investigación plantea por primera vez la posibilidad de desarrollar una nueva terapia basada exclusivamente en la tecnología ultrasónica, no ionizante, que supondría un tratamiento no invasivo, de bajo coste, de fácil aplicación y sin daños colaterales para los pacientes”, explica Iciar González, investigadora del CSIC en el Instituto de Tecnologías Físicas y de la Información “Leonardo Torres Quevedo” (ITEFI).
Cómo se desarrolló la aplicación de ultrasonidos a células cancerosas
Los investigadores desarrollaron la investigación sobre muestras in vitro de cáncer de páncreas. “Aplicamos una dosis de tan solo veinte minutos de ultrasonidos de baja intensidad sobre muestras de células de cáncer de páncreas PANC-1 y conseguimos parar el avance colectivo e individual de las células en monocapa durante, al menos, dos días”, indica la investigadora.
“La aplicación de ondas ultrasónicas en determinadas condiciones acústicas durante 15 o 20 minutos inhibe la capacidad de movimiento celular durante largos periodos de tiempo, de más de 48 horas o incluso hasta 3 días después del tratamiento. Además, hemos observado también cierta inhibición en los procesos de proliferación celular que, en la actualidad, analizamos en otros experimentos en nuestros laboratorios”, añade.
Cuál será el siguiente paso en esta línea de investigación
El próximo paso para demostrar la eficacia e idoneidad de esta terapia serán las pruebas in vivo con ratones. El objetivo es probar con ratones con diferentes tipos de tumores los buenos resultados conseguidos in vitro.
Los experimentos in vivo con ratones se realizarán en colaboración con investigadores de la Universidad de Harvard, la Universidad del País Vasco y el Instituto Ramón y Cajal de Investigación Sanitaria gracias al uso de pequeño dispositivo ultrasónico ajustable a cada animal.