El plan de carriles bicis de la capital está ejecutado casi al 95%. Tan solo quedan ultimar unos detalles para que estén totalmente listos los 8,6 kilómetros de vías ciclistas incluidas en el Plan Carril-Bici Rambla Federico García Lorca, Paseo Marítimo, Ciclocalle Calle Real, Calle Murcia y Camino de la Mar, con un presupuesto de 400.000 euros.
Como se recordará, el proyecto de carril-bici redactado desde el Ayuntamiento incluye la construcción de siete nuevos tramos, más un octavo que supondrá el reacondicionamiento del existente en el Parque Nicolás Salmerón, actualmente también en ejecución. En total, 8.675 metros que se sumaran a los 33,16 kilómetros de carril bici que hoy existen en la capital.
En resumen, estas actuaciones recorren un eje Norte-Sur, conectando la vía ciclista del Parque Nicolás Salmerón con la ciclo-calle de Rambla Amatisteros, a través de la Avenida Federico García Lorca; un eje Este-Oeste, que permite la conexión de la vía ciclista a la Universidad ubicada en la Carretera Provincial AL-3202 con el carril bici del Parque Nicolás Salmerón, a través del Paseo Marítimo y el Paseo de Ribera; la conexión también del Parque Nicolás Salmerón con Avenida Federico García Lorca y Rambla Belén, mediante una ciclo-calle unidireccional a través de las calles Real y Murcia; la ejecución del carril-bici en el Camino de la Mar, en La Cañada, así como el reacondicionamiento del carril bici existente en el Parque Nicolás Salmerón.
El alcalde de Almería, Luis Rogelio Rodríguez Comendador, ha podido comprobar el estado de unos trabajos que han entrado en su recta final, con un 95% aproximadamente de ejecución respecto al cronograma planteado por la empresa adjudicataria y de acuerdo con el proyecto redactado por la Empresa Municipal “Almería XXI”, a quien el Ayuntamiento encargó en su día la encomienda de gestión de esta obra.
Rodríguez-Comendador ha recordado que el objetivo de esta actuación es el de “interconectar los carriles-bici preexistentes en la ciudad, dar continuidad a la trama viaria y generar una malla cerrada que garantice unas condiciones óptimas de seguridad vial para los usuarios de las bicicletas”, destacando “el impulso que esta infraestructura, que ya viene siendo disfrutada por muchos almerienses, ofrecerá a la ciudad en materia de movilidad”. En su fase final, las tareas ahora se centran en el tratamiento superficial del trazado así como en su señalización.