El mundo hispano se enfrenta al reto de la globalización con el desafío de escalar puestos en los ránquines de universidades y de inversión en Investigación. Pero lejos de potenciarse la ciencia hispana en sus centro de conocimiento el problema parece agravarse, a tener de la denuncia que están realizando varios rectores de Argentina, Colombia, México y Uruguay durante el foro inaugural de la Conferencia Latinoamericana y Caribeña de Ciencias Sociales (Clacso) 2025, que se desarrolla en la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), una de las sedes principales del evento.

Desde este espacio académico, líderes universitarios expresaron su preocupación por el debilitamiento de las políticas públicas de investigación en la región, en un contexto marcado por la desinformación, la aceleración tecnológica y la pérdida de confianza en el conocimiento científico.
La situación más alarmante fue expuesta por representantes de universidades públicas argentinas. Mercedes Leal, vicerrectora de la Universidad Nacional de Tucumán, advirtió que “una de las primeras medidas del actual gobierno fue disolver el Ministerio de Ciencia y Tecnología y vaciar el financiamiento a la investigación, en un marco de desprecio por la producción científica”.
Aunque reconoció que “el panorama es sumamente adverso”, destacó que más de 2.000 investigadores continúan trabajando y que la comunidad científica ha respondido con alianzas estratégicas que permiten resistir el asedio político y mediático. “Las universidades están asumiendo el reto de sostener la agenda científica del país”, aseguró.
Franco Bartolacci, rector de la Universidad Nacional de Rosario y moderador del foro, afirmó que Argentina atraviesa el momento más difícil en 40 años. “Estamos empezando a perder investigadores, y lo que ocurre en el país no es un fenómeno aislado. Clacso es fundamental para compartir estas realidades y construir respuestas colectivas desde América Latina y el Caribe”, señaló.
Además hizo un llamado a transformar la educación superior desde adentro: “necesitamos una revolución académica, administrativa y curricular. Repensar la arquitectura del aula y encontrar nuevos modos de enseñar”.
Desinformación y trivialización del conocimiento
El rector de la UNAL, profesor Leopoldo Múnera Ruiz, anfitrión del encuentro, se sumó a las voces que alertan sobre la pérdida de centralidad de la ciencia, esta vez no solo por razones presupuestales, sino también simbólicas. Cuestionó la creciente adaptación del discurso científico a narrativas mediáticas carentes de rigor, lo que calificó como una forma de “trivialización del conocimiento”.
“El desafío es cómo deconstruir lo verosímil y demostrar que no se puede reemplazar el conocimiento sustentado en evidencia. Lo que se construye en los medios no puede sustituir a la ciencia”, afirmó.
En el mismo sentido, Silvia Giorguli Saucedo, presidenta de El Colegio de México, destacó que uno de los principales retos es la negación del conocimiento científico. “Frente al auge de formas de comunicación que no están basadas en evidencia, las universidades debemos encontrar nuevas formas de comunicar y ser contrapeso frente a las noticias falsas”, sostuvo.
También resaltó el papel de Clacso como un espacio articulador en defensa del conocimiento riguroso y de los principios ciudadanos que históricamente ha promovido la universidad pública.
La inteligencia artificial: entre el miedo y la crítica
Aunque el foco estuvo en la crisis presupuestal, otro eje del foro fue la inteligencia artificial (IA). El rector Múnera propuso no caer en visiones alarmistas, como el “dilema de Frankenstein”, que la concibe como un monstruo sin ética, ni en la idealización de su potencial. En su lugar, llamó a construir una teoría crítica que permita establecer una relación ética, responsable y transformadora entre IA e inteligencia humana.
Según informó, más de 120 de los 1.000 grupos de investigación de la UNAL trabajan en temas relacionados con IA. “La inteligencia humana es más fuerte en lo motriz y perceptivo, mientras que la IA lo es en la lógica de datos. Por eso debemos preservar lo afectivo, lo imaginativo, lo que la IA no puede replicar, ya que no es posible sacarla del escenario, pero sí construir una relación ética, responsable y transformadora”, expresó.

Ciencia con rostro territorial
Desde el sur de Colombia, el rector de la Universidad del Cauca, Deibar René Hurtado Herrera, resaltó que el desfinanciamiento no solo golpea la ciencia en los grandes centros urbanos, sino que también afecta especialmente a las regiones históricamente excluidas. “El Cauca es el segundo departamento con más resguardos indígenas y el quinto en población afrodescendiente. La universidad se convierte en una luz de esperanza para jóvenes de Cauca, Huila, Caquetá, Nariño y Putumayo”, señaló.
También compartió experiencias de ciencia con pertinencia territorial, como el trabajo con el pueblo Nasa en acuicultura sostenible: “a partir de vísceras de trucha estamos generando concentrado para alimentación, lo que impulsa la economía circular de la región”.
Con este foro inaugural, la CLACSO 2025 abrió una agenda ambiciosa que se desarrollará durante los próximos días con cientos de ponencias, talleres y debates académicos en los que se busca pensar colectivamente el futuro de la universidad, la ciencia y el pensamiento crítico en la región.