Rosa Regás comenzó su intervención hablando de la ciudad de Almería, visitada en varias ocasiones en los últimos años por la escritora y señaló que “vine a ver a José Ángel Valente cuando vivía aquí y también he estado en pueblos de la provincia, viendo el progreso que han vivido pasando de la pobreza a la riqueza y también me llama la atención la labor de Manuel García Iborra que tiene una librería en El Ejido y que siempre está llena”.
Regás explicó que “la cultura es la única cosa que puede hacer progresar a la sociedad. Estamos muy confundidos y engañados porque creemos que es la economía la que cambia el mundo, y la economía no cambia nada. Si la cultura no ha entrado en nosotros, no hemos adelantado absolutamente nada”.
La escritora habló de la importancia que tiene la lectura. “La lectura es uno de los elementos que tiene la cultura de manifestarse. La lectura es lo que nos convierte en creadores. Todos podemos convertirnos en creadores, como lo es un pintor, un escultor o un músico, lo único que nos hace falta es creer lo que estamos haciendo. El escritor lo que hace para escribir un relato, una novela o un ensayo es entrar en sí mismo y rescatar la experiencia y la memoria”.
“Cuando una persona lee hace exactamente lo mismo que el escritor. Una de las cosas más importantes de la lectura es que nos convierte en creadores. Ser creador no es una cosa que nos dé importancia, es ora manera de ver la vida y mirar el mundo, es convertirnos de pronto en personas que sabemos manipular y utilizar los elementos que tenemos y hacer una nueva creación”.
“Leer nos da plenitud, algo que no da ni el consumo, ni el lujo, ni la fama ni ninguna de estas cosas que están en boga ahora para convertirnos no en creadores ni en seres, sino convertirnos en clientes. La televisión y todos los medios están manipulados para que nos convirtamos en clientes. La lectura desarrolla el criterio y nos pone en el camino de la libertad”, dijo Regás.
“Si nos convertimos en creadores leyendo, nos será mucho más fácil convertirnos en creadores caminando, cocinando, haciendo trabajos de jardinería, yendo a una ONG para hacer un trabajo de compromiso. De esta manera, alejamos de nosotros el peligro mayor que tenemos como es la rutina y la costumbre. A medida que nos vamos haciendo mayores tenemos la tendencia en hacer las cosas por rutina”, afirmó la escritora.
La autora catalana fue presentada por el Decano de la Facultad de Humanidades de la Universidad de Almería, Manuel López Muñoz, el cual hizo una semblanza biográfica de esta mujer comprometida y a la vez con una gran capacidad creadora.
López Muñoz apuntó que “la explosión literaria de Regás es tardía, ya que ocurrió en 1987 con un ensayo sobre la ciudad de Ginebra. El viaje es para ella una afición declarada, algo que le gusta sobremanera, aunque tenga que pagar el precio de los controles de seguridad en los aeropuertos. El viaje a Ginebra la convirtió en escritora”.