‘Pluto’, ejemplo de los clásicos más contemporáneos

Aunque una parte del público pensaba que ‘Pluto’ podría ser una obra de teatro clásico, lo cierto es que desde el primer momento se esfuma la idea ya que se trata de una comedia, dirigida de forma magistral por Magüi Mira, versionada por Emilio Hernández y con un reparto de lujo, con Javier Gurruchaga a la cabeza.

Pluto se representó este sábado en el Teatro Auditorio de Roquetas de Mar. Con una escenografía muy sencilla, a lo largo del desarrollo de la acción, hay un coro griego de mascaras sobre el escenario. Entre acción y acción se van desarrollando distintas canciones a modo de musical, lo cual hace mucho más interesante la puesta en escena.

La obra de Aristófanes en su argumento trataba temas muy de actualidad, a pesar de las diferencias de época, como son la corrupción. Por ello hay una serie de personajes como el libre que decide ser esclavo para poder pagar sus deudas o la mujer que cree en el poder innato de las mujeres para gobernar en un mundo de hombres. En escena estaban Carión, Crémilo, Blepsidemo y Praxágora, un elenco de personajes que hablan con total claridad, sin tapujos.

Hay críticas para aquellos políticos que suelen cobran altos sueldos, y no dan nunca ejemplo de nada, ya que hay una gran diferencia entre los poderosos que todo lo tienen y los que menos tienen y que llegan casi a pasar hambre. Aunque la obra se escribió hace mucho tiempo, el mensaje es muy actual y eso hace que durante dos horas nadie pierda el hilo conductor de este montaje, muy bien llevado a escena.

El turno de los poderosos, se hace esperar pero llega. El político, el sacerdote y la dama, los tres se enfrentan al populacho, después de que la suerte, y el dinero se hayan posicionado al otro lado. Sin mucho acierto, y con el apoyo de la diosa de la Pobreza, o lo que es lo mismo, Gurruchaga con peluca, deciden dar tregua a los pobres.

Siendo muy justos, hay que decir que la obra es muy entretenida, el mensaje llega al público con claridad y luego hay que subrayar el vestuario que fue realizado por Lorenzo Caprile. Javier Gurruchaga es la gran estrella de esta comedia, que cuenta con un reparto de autentico lujo. El veterano cantante y actor está soberbio como Pluto aunque incluso gusta más en el personaje de Pobreza. Jorge Roelas, muy conocido por su participación en series de televisión está fantástico. La gran sorpresa de la noche la puso Sergio Otegui que hace de tesorero que protagoniza un desnudo integral, aunque hay elementos en su cuerpo que son postizos.

Destacar la participación del coro que aparte de ser un elemento innovador en la obra marca el cambio de escena en esta obra. El coro estaba formado por Sara Jiménez Fernández, Rubén Torres, Sebastián Betti, Sergio Pérez, Alba Amat, Lara Martorán, Javier Reche, Laura Ramírez, Ainhoa Hernández y Pablo Boutou (Gallego).

Y finalmente hay que destacar la música en esta obra. Las canciones, ideadas por Marco Rasa (pianista) y Javier Gurruchaga son muy pegadizas y gustaron al público. El resto del cuadro musical que se ubicaba en escena, Mario Carrión (batería), Josele Mejía (contrabajista) y Segundo Mijares (saxofonista), lucían vestidos también de época.

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