Un estudio publicado por un equipo de la Universidad de Murcia (UMU) añade un punto de polémica más a la igualdad de oportunidades en la Prueba de Acceso a la Universidad en la Comunidad Valenciana. Los investigadores han encontrado un nivel considerable de discrepancia en el proceso de calificación de los tribunales de la PAU, lo cual puede afectar a la igualdad de oportunidades en el ingreso a estudios de educación superior. Las diferencias en los niveles de severidad se detectaron tanto entre universidades como entre asignaturas, lo que abre el debate sobre la necesidad de mejorar los procesos de comparabilidad de los estándares de examen y la equidad para el alumnado.

Matemáticas Aplicadas a las Ciencias Sociales ha sido la asignatura que más complejidad ha generado, frente a Historia de España, que obtiene una puntuación más similar entre los centros.
Alejandro Veas, profesor titular del Departamento de Psicología Evolutiva y de la Educación y José Antonio López Pina, catedrático de Psicometría en el Departamento de Psicología Básica y Metodología, ambos de la Universidad de Murcia (UMU), son los autores del estudio en el que se han centrado en los tribunales de la convocatoria PAU de junio de 2018 en las tres provincias de la comunidad valenciana: Alicante, Valencia y Castellón. En total, se analizaron 54 tribunales evaluadores de evaluación y 3.000 estudiantes de cinco universidades públicas.
A pesar de la existencia de estándares comunes, que en teoría deberían ser aplicados por todos los tribunales, los autores consideran que otro factor diferencial puede ser el formato de examen utilizados entre asignaturas —como preguntas tipo test frente a ejercicios de preguntas cortas o de desarrollo—, lo que puede contribuir a una menor consistencia en los criterios de evaluación.
Cómo mejorar la igualdad de oportunidades en la PAU
Las PAU constituyen un programa nacional esencial para evaluar el nivel de rendimiento de los estudiantes en España y determinar su acceso al sistema de educación superior. Sin embargo, la regulación política y administrativa del país, que otorga autonomía a cada región para diseñar pruebas específicas siguiendo estándares mínimos, genera dificultades para asegurar la homogeneización de los estándares de evaluación aplicados en los exámenes.
Con estos datos sobre la mesa, los responsables del estudio proponen, siguiendo el marco conceptual de comparabilidad de constructo aplicado en países como Reino Unido o Australia, actuaciones tales como una formación previa en el uso y aplicación de estándares, la homogeneización del marco analítico de corrección entre las distintas materias, y una mayor accesibilidad a la recopilación de microdatos anonimizados a nivel nacional para un análisis más eficaz a escala nacional.
En conclusión, este estudio sirve como base para reflexionar sobre las deficiencias del sistema. “Esperamos que estos resultados sirvan para priorizar los esfuerzos coordinados entre las instituciones educativas y las autoridades locales, y desarrollar estrategias efectivas que permitan avanzar en los procesos de comparabilidad en este ámbito”, concluye Veas.
Esta investigación, que ha empleado como metodología el Modelo Rasch de Múltiples Facetas (MFRM), está financiada con cargo al proyecto nacional I+D ‘Análisis de las Pruebas de Acceso a la universidad y su relación con PISA: Identificación de estándares curriculares y competenciales mediante enfoques psicométricos’ (referencia PID2020-115248RA-I00).