Nuevos restos de dientes revelan que en Teruel vivieron dos grupos de espinosáuridos

Una investigación llevada a cabo por paleontólogos de la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel-Dinópolis y publicada en la revista científica Journal of Iberian Geology, analiza varios dientes de dinosaurios espinosáuridos de hace aproximadamente 125 millones de años (Cretácico Inferior), procedentes de las excavaciones de la Fundación en Galve (Teruel). Estas piezas demuestran que en la zona vivieron dos grupos de estos dinosaurios.

Recreación del aspecto de un espinosáurido.

En particular, estos fósiles proceden de sedimentos pertenecientes a la Formación Camarillas, con una edad de hace aproximadamente 125 millones de años (Barremiense, Cretácico Inferior).

Qué eran los espinosáuridos

Los espinosáuridos fueron dinosaurios terópodos (carnívoros) que se caracterizaban por la presencia de un hocico largo con dientes cónicos (similar al de algunos cocodrilos) y extremidades anteriores con garras largas y afiladas. Estas adaptaciones evidencian que estos dinosaurios tuvieron una dieta basada principalmente en peces. Los fósiles analizados se asignan a los dos grupos que conforman los espinosáuridos: los espinosaurinos y los barionicinos, cuyos representantes más famosos son Spinosaurus Baryonyx, respectivamente

En relación con el registro de espinosáuridos, los dientes suelen ser los fósiles más comunes, por lo que el conocimiento general de su anatomía está bastante limitado. En lo concerniente a la provincia de Teruel hay otros dientes y varios elementos aislados, y se conoce parte de un ejemplar procedente de la misma formación geológica que los dientes analizados de Galve, pero del municipio de Camarillas; de ahí su nombre, Camarillasaurus.

Fósiles hallados en Teruel.

Qué información aportan los nuevos fósiles

Los nuevos fósiles aumentan considerablemente el conocimiento sobre la variabilidad de dientes y sobre la diversidad de estos dinosaurios. En el estudio se concluye que los dientes muestran morfologías diferentes, determinándose que uno de ellos (el perteneciente a un espinosaurino) es un nuevo morfotipo dental en el registro paleontológico. 

La presencia de, al menos, dos taxones de espinosáuridos con una edad geológica similar es conocida en otras regiones del este de la península ibérica y en Inglaterra, entre otras áreas geográficas.

Cómo vivían estos dinosaurios

En el caso de Teruel, esta simultaneidad implica que los ambientes fluviales del Cretácico Inferior supondrían una fuerte influencia para los espinosáuridos, ya que dispondrían de una fuente de alimento diversa, desde peces hasta otros dinosaurios. Fósiles de estos vertebrados, como por ejemplo el ornitópodo Iguanodon galvensis, son abundantes en los mismos depósitos de Galve de los que proceden los dientes estudiados.