Joaquín Moya-Angeler Cabrera ha anunciado hoy miércoles en el Pleno del Consejo Social de la Universidad de Almería (UAL) su renuncia formal a la presidencia del órgano de gobierno que garantiza la participación de la sociedad en la institución académica. En su intervención, ha destacado el “privilegio” que ha supuesto ostentar este cargo durante dos décadas y “haber visto la creación y el desarrollo de una universidad desde la inicial Comisión Gestora hasta lo que hoy significa la Universidad de Almería”. Asimismo, ha manifestado que no sería bueno mantenerse en la presidencia “por encima del ya larguísimo e injustificado periodo de veinte años” y que la entrada de “savia nueva” aportará “nuevas y brillantes ideas” al Consejo Social y a la Universidad en su conjunto.
El rector, Pedro Molina, ha alabado el compromiso y la contribución desinteresada de Moya-Angeler hacia la UAL en este tiempo y ha resaltado que “Joaquín se ha puesto durante 20 años al servicio de la Universidad de Almería, con el convencimiento de que la Universidad es un factor clave de desarrollo y bienestar colectivo”.
Entre las aspiraciones de Joaquín Moya-Angeler siempre se ha encontrado una universidad pública al servicio de la sociedad y por ello ha trabajado, durante tantos años, al frente de las instituciones que garantizan la vinculación entre la universidad y la empresa. Así, ha presidido, desde su constitución, el Consejo Social y la Fundación Mediterránea de la Universidad de Almería, y más tarde la Conferencia de Consejos Sociales de España y la Corporación Tecnológica de Andalucía.
Destaca entre sus proyectos de apoyo a esa vinculación la creación de la Fundación Mediterránea de la Universidad de Almería, una fundación de carácter universidad-empresa que nació en 1999 para colaborar en el fomento del empleo, ayudando a los estudiantes y graduados de la Universidad de Almería a conocer mejor las posibilidades de empleo y de autoempleo y acercarse a las empresas fundamentalmente a través de prácticas en ellas. Moya-Angeler consiguió aunar a la Universidad, la Diputación de Almería, el Ayuntamiento de Almería, junto a las organizaciones empresariales y empresas más destacadas de la provincia de Almería para poner en marcha la Fundación con 24 socios fundadores y un capital fundacional de 450.000 euros, que hoy en día sigue funcionando con éxito.
