Un paso adelanta para el Parque, uno atrás para los coches. Así se puede hablar de la propuesta presentada ayer por la Consejería de Medio Ambiente a la Junta Rectora del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar, por la que se pretende llevar a cabo una reorganización de los aparcamientos de las calas de Mónsul y Media Luna, que entrará en funcionamiento la próxima semana santa. El objetivo de esta actuación es minorizar los efectos negativos del tráfico en la zona.
Esta propuesta está recogida en el proyecto de Movilidad Sostenible y Acondicionamiento Ambiental del Litoral, que se desarrollará en estas joyas de Cabo de Gata. Cada verano, estas playas se ven sometidas a un tráfico intenso que no resulta adecuado para una zona natural del valor que tiene este entorno.
En este plan hay contempladas medidas para controla el intenso tráfico que tiene que soportar este entorno en época estival, también encaminadas a reducir el impacto paisajísitico y sobre el medio natural. Por este motivo, además del control en los accesos, medida puesta en marcha desde hace dos vernanos, el proyecto también contempla la adecuación de unos nuevos aparcamientos junto a la Casa Cuartel de Mónsul, que sustituirá a la que actaulmente existe.
El nuevo aparcamiento podrá albergar el mismo número de vehículos que los que actualmente existen y tendrá una extensión cercana al tercio de hectárea.
