Matemáticas, una profesión sorprendente

José Ojeda es el ganador del problema del último Boletín Matemático.

Para muchos, las Matemáticas siempre ha sido esa odiosa asignatura imposible de superar, una materia que exige pensar, y que no se puede aprobar sin haberla trabajado durante todo el curso, como sí ocurre con otras muchas materias que forman parte del aprendizaje formal en los centros de enseñanza. El hecho de requerir más esfuerzo o de presentar unos contenidos que no se asumen con la facilidad a la que la mayoría de los alumnos están acostumbrados, ha marginado a las Matemáticas, a una materia que se sitúa a la base de cualquier otra ciencia y cuyo conocimiento es esencial para poder desarrollar otras disciplinas científicas básicas y aplicadas.

Sin embargo, junto a esta mayoría que para nada le gustan las Matemáticas hay un grupo de personas, que no es que estén hechas de una pasta especial, como siempre se dice de deportistas y toreros, sino que han sabido ver una explicación al mundo que nos rodea donde otros sólo veían números y operaciones o, al menos, han tenido curiosidad y tesón para ver el mundo con otros ojos. “Seguramente lo más difícil fue adaptarme a la forma de pensar de los matemáticos, tan lógica y conceptual, pero realmente, una vez que lo consigues, sin darte cuenta acabas aplicándolo a otras facetas de tu vida”, explica Livia Lázaro, una titulada en Matemáticas por la Universidad de Almería, que trabaja como técnico de banca en la entidad almeriense Cajamar.

Livia Lázaro se decidió a estudiar Matemáticas porque tenía claro que “quizás en el futuro me ayudaría a encontrar trabajo, como así fue”. No era una fanática de los números, pero sí les tenía su estima, al menos, la suficiente como para hacer de ellos su profesión. Esta profesional de los números reconoces que “son poco conocidas” las oportunidades que ofrece estudiar matemáticas y está segura de que si muchos jóvenes las conocieran bien se animarían a estudiar esta carrera.

Hay que recordar que los matemáticos son unos de los profesionales más escasos y, por lo tanto, demandados de nuestro país. Las universidades, muchas veces, no saben qué hacer para ‘vender’ a los futuros universitarios las ventajas que conlleva estudiar una carrera como ésta, en la que los alumnos ven recompensados sus esfuerzos mejor que en otras carreras, y se muestran seguros de que si muchos de los alumnos que ahora están en Bachillerato conocieran las ventajas de estudiar esta carrera, sus aulas estarían mucho más llenas de lo que hoy día lo están.

En las aulas de Matemáticas también se encuentran casos como el de Lucía Gómez, una titulada en Matemáticas, que en la actualidad forma parte de la plantilla de Citibank España, como analista de modelos Scoring en Ciclo de Créditos. Ella se confiesa una apasionada de las Matemáticas. Prácticamente desde su niñez, ella disfrutaba resolviendo problemas, buscando realidades a las que aplicar las fórmulas matemáticas que aprendía en el colegio. Su pasión por esta ciencia era tal que no tuvo dudas cuando tocó elegir carrera: ella lo tenía decidido desde hacía muy tiempo ya. “Principalmente desde pequeña siempre me ha gustado resolver problemas. Al final tras evaluar las opciones, llegué a la conclusión de que con Matemáticas podría aplicar mis conocimientos en muchos campos y allá que me fui junto con muchos compañeros de mi generación…”.

Y su elección fue todo un acierto, porque le ha permitido desarrollar su carrera profesional en una entidad bancaria muy importante, donde ha encontrado que la han valorado profesionalmente. Es cierto que al principio encontró algunos problemas para adaptarse a la carrera, aunque no hay nada que no tenga solución con esfuerzo que, a la postre, se ha convertido en el secreto para superar ésta y cualquier otra carrera, por muy complicada que sea. “ Es una carrera dura que no todo el mundo termina, pero sin duda en estos tiempos recomiendo la carrera de matemáticas ya que lo que prima es un buen trabajo, y las matemáticas no sólo tienen muchas salidas sino que además somos pocos los licenciados en comparación con otras carreras”.

Lucía Gómez tuvo más problemas para manejar la parte teórica de la carrera que la práctica. Sin embargo, a pesar de la exigencia, que fue muy alta, pudo superar con éxito esta parte más dura de la titulación y continuar su carrera con una base muy sólida, que le permitió afrontar grandes retos en su etapa de estudiante.

Como en todas las carreras, la experiencia internacional es muy importante, como reconocen estas dos tituladas en Matemáticas. Lucía Gómez cuenta con haber realizado varias estancias en el exterior, que le permitieron adquirir unas competencias que van más allá de la enseñanza formal que se recibe en las universidades. En ese tiempo pudo participar en centros de investigación y descubrir la importancia que para la ciencia tiene el dominio de esta materia. “En realidad he tenido dos oportunidades de formación en el extranjero, primero con una beca Erasmus de diez meses en Francia y a posteriori con un Master in Science de dos años en EEUU, que me permitió trabajar en un proyecto de imágenes muy interesante con un ingeniero de GE Medical System. Además fui seleccionada para participar en una workshop de una semana en Minessota donde se proponían seis proyectos de empresas de la talla de Boing y Ford”.

Livia Lázaro también realizó una estancia formativa en el extranjero, concretamente en Londres, donde pudo comprobar que el nivel de exigencia de la universidad española es más elevado, si bien la parte práctica se trabaja menos. En cualquier caso, es consciente y así lo manifiesta, del prestigio que tienen los titulados españoles fuera de nuestras fronteras.

En el apartado laboral es donde reside uno de los principales atractivos para estudiar matemáticas. Estas dos profesionales, formadas en la Facultad de Ciencias Experimentales de la Universidad de Almería, animan a estudiar Matemáticas por el amplio abanico de oportunidades que se les presenta a los recién titulados. Y son tantas que, incluso en muchos casos, tienen la opción de quedarse en Almería, como le ha ocurrido a Livia Lázaro, que desarrolla su labor profesional en Cajamar. Así, banca e informática son los sectores que más interés muestran por los titulados en Matemáticas, aunque ahí no se acaban las oportunidades, ya que “existen muchas empresas de servicios y consultoras que contratan matemáticos”, explica Lucía Gómez.

Matemáticas se presenta como una opción con mucho futuro, como una carrera no masificada en la que, además de las pertinentes materias, se enseña una manera diferente de pensar, una forma de razonar que, como asegura Livia Lázaro, “te resultará útil a lo largo de tu vida en diferentes situaciones”. Una carrera para la que, directamente, el paro no es un problema.

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