El público asistente anoche al concierto que la Orquesta Ciudad de Almería y el Coro de la misma OCAL ofrecieron dentro del Ciclo de Música Sacra disfrutaron de un espectáculo relajante, una invitación al descanso y la meditación. En el repertorio del sábado una de las ‘misas’ más populares, el ‘Réquiem de Gabriel Fauré’. Una de las misas ‘musicales’ mejor consideradas de la historia, y que vio la luz en 1888. Entre las voces del Coro de la OCAL, en esta ocasión, destacaron como solistas Elena Simionov (soprano) y Josep Ramón Olivé (barítono).
Hubo lugar en el recital ofrecido ayer sábado en la Catedral para escuchar también a J. S. Bach, con el ‘Concierto de Brandenburgo No. 6’. Una vez más Michael Thomas dirigió a esta lujosa formación musical. El público vivió una velada extraordinaria, y los aplausos resonaban ayer de manera especial en la Catedral de Almería. Una formación musical corta, la de anoche, y que incorporó instrumentos ‘antiguos’ que hicieron sonar de manera distinta el programa previsto.
Este concierto se enmarca dentro de la frenética programación previa a la Semana Santa almeriense. Cuando la esta semana, el viernes de Dolores, esta programación del Ciclo de Música Sacra toque su fin, habrán sido más de una veintena de actividades, principalmente musicales, pero también conferencias, las que se habrán celebrado. Bandas de música, de Semana Santa, coros, la OCAL, y ponencias, han poblado una oferta cultural que culminará con el ya tradicional homenaje a la Saeta.