El Curso de Verano que estudia la música y cultura en tiempos de las independencias hispanoamericanas coincidiendo con su bicentenario, y la celebración del IX Festival de Música Renacentista y Barroca, afronta entre el viernes y el sábado sus dos últimas sesiones. Uno de los directores del Curso, el Catedrático de Historia de la UAL, Fernando Martínez, resumía sus impresiones en una sola frase: el resultado no ha podido ser mejor.
Martínez apunta que tanto el curso de música como el dedicado a la historia se han desarrollado “muy satisfactoriamente”, con una acogida muy importante de estudiantes, casi un centenar, y que los talleres han funcionado igualmente muy bien. “Ha habido un gran aprendizaje en los talleres de coro, danza, cuerda pulsada, órgano y clave. Las encuestas de satisfacción que nos van llegado nos dan sobresaliente y de ahí para arriba. Las conferencias han sido todas ellas de una gran calidad, con profesores nacionales e internacionales. Han sido charlas espléndidas que han servido para revisar de lo que ha sido hasta ahora la independencia de los países latinoamericanos”, decía Martínez.
Las conferencias, apuntaba el director del Curso, han sido especialmente interesantes porque se han alejando de la oficialidad de las versiones aportadas desde hace dos siglos por los distintos gobiernos hispanoamericanos.
Por otra parte, en relación con el taller que se ha desarrollado sobre historia, el resultado, señalaba Fernando Martínez, ha sido interesantísimo. “Todos los conferenciantes que han pasado por el curso han planteado sus distintas formas de investigar la historia. Las conferencias han sido auténticas clases de historia y de conocimiento profundo de cómo se hace y se entiende la historia a través de la reflexión en todos su campos, también en el de la macro y la micro historia”.
Respecto a los conciertos, ha habido noches mágicas en el castillo de Vélez Blanco. La pluralidad de la oferta ha logrado que todas las sesiones hayan estado abarrotadas de público y la calidad de las orquestas, que los aplausos hayan durado varios minutos y se hayan reclamado varios bises a los artistas. “He visto a gente llorar de emoción, especialmente en el concierto “Salga la luna”, de música española y napolitana en la época de Carlos V que ofreció la soprano Renata Fusco y la orquesta Durendal Ensemble. Fue, simplemente, impresionante.
También ha sido fantástico el de música indígena, con un recorrido hasta el Códice de Trujillo, que, por primera vez, se presentaba en España”, destacaba hoy el co-director de este Curso de Verano. Esta noche actuará la Coral de Almería en su escenario habitual, la Iglesia de Vélez Blanco, que estará de nuevo abarrotada, y mañana, también en la Iglesia Parroquial de Santiago, habrá un concierto ofrecido por los alumnos que han participado en los talleres de coro.
El resultado, por tanto, no ha podido ser mejor. “Ha venido mucha gente de fuera del pueblo a seguir el curso expresamente. No sólo está destinado a los alumnos, sino que los vecinos participan también de una forma muy activa. Es cierto que con este curso se hace real la máxima de la Institución Libre de Enseñanza de llevar la educación, el saber y el conocimiento hasta aquellos lugares donde no llega la Universidad.
Además de todo ello, un curso de estas características supone una aportación económica muy importante y da un gran empuje al turismo cultural en las zonas rurales. Es una forma, por otra parte, de aprovechar nuestro patrimonio artístico y cultural y ponerlo en valor”, apuntaba Fernando Martínez.
