Los modelos matemáticos, también para restaurar obras de arte: lo están probando con un mural

Una de las 20 obras que el artista Alipio Jaramillo legó a la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) fue redescubierta en la Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales (UNAL), en medio del proceso de renovación de sus instalaciones. Después del hallazgo de la pieza Homenaje al campesino colombiano, un grupo de matemáticos busca restaurarla con la ayuda de ecuaciones diferenciales avanzadas, que permiten reconstruir digitalmente los fragmentos deteriorados.

El mural de Alipio Jaramillo hallado en la UNAL se podría restaurar en el futuro gracias a modelos matemáticos. Foto: archivo Unimedios.

El mural permaneció oculto por décadas bajo 12 capas de pintura y una de pañete, añadidas en distintas intervenciones. El edificio de Derecho, una construcción emblemática de la Universidad, fue reinaugurado recientemente, lo que hizo aún más impactante el hallazgo.

El artista Jaramillo quiso plasmar la vida en el campo y las condiciones propias de la década de 1940, relacionadas con el conflicto armado y la resistencia de los habitantes de las zonas rurales del país; se cree que hubo otros murales de la misma índole que se perdieron completamente con los arreglos.

Este artista estudió en la UNAL, precisamente en la Facultad donde se halló su obra, y entre sus trabajos más famosos están: La batalla del pantano de Vargas y Montañas, de estilo cubista, MinerosQuijote con Sancho, y dos autorretratos a sus 55 y 75 años. Alrededor de 33 pinturas y dos murales forman parte de la colección familiar de sus sobrinos y demás allegados.

Alejandro Sánchez, estudiante de la Maestría en Matemática Aplicada, ya encontró modelos matemáticos satisfactorios para dar el primer paso en la intervención digital. Foto: María Fernanda Londoño, Unimedios.

Matemáticas para restaurar obras de arte

Así como su brocha capturó momentos cruciales de la historia del país, ahora un grupo de matemáticos de la UNAL busca preservar su legado. ¿Cómo? A través de ecuaciones diferenciales parciales, que analizan los cambios en la escala de grises de las imágenes del mural con ayuda de programas especializados. Estas ecuaciones permiten reconstruir digitalmente las áreas de la obra que están deterioradas.

El profesor Diego Roldán, director de la Maestría en Matemáticas Aplicadas de la UNAL, explica el proceso con la siguiente metáfora: “si analizamos la temperatura que va cambiando en una taza de café, estas ecuaciones nos permiten determinar la evolución que el líquido va teniendo con el tiempo, de la misma forma que puede ocurrir en la pintura que formaba parte del mural”.

Estas ecuaciones de “calor” están revolucionando la restauración de obras en el país. Gracias a su integración en lenguajes de programación como Python es posible generar “máscaras” o capas digitales que permiten delimitar o resaltar las áreas del mural que requieren mayor intervención.

Esta investigación es una de las principales líneas de estudio de la Maestría en Matemáticas de la UNAL. Estudiantes como Alejandro Sánchez han probado distintos modelos matemáticos para determinar cuál ofrece los mejores resultados en este tipo de restauraciones. Hasta ahora las ecuaciones de difusión han demostrado ser las más efectivas, ya que permiten reconstruir detalles esenciales de la obra, como los rostros, brazos o las ruanas de los campesinos representados en el mural.

Grupo de investigación que analiza el rendimiento de las ecuaciones diferenciales parciales para ayudar en la restauración de este tipo de obras. Foto: María Fernanda Londoño, Unimedios.

¿El artista o la herramienta?

Por su parte, Daniela Serrano, profesora de la Universidad Externado de Colombia y restauradora de arte, asegura que es necesario crear las pautas y los criterios para que las herramientas de inteligencia artificial (IA) empleadas en estos procesos digitales no borren la huella y estilo del autor, pues “esta tecnología no tiene por qué competir con el artista original”.

Esto pone sobre la mesa un debate valioso en torno a la ética en el arte, un campo en el que los profesores Serrano y Roldán trabajan para que la restauración de cualquier obra en el país sea rigurosa y mantenga esa “ventana” del pasado, que fundamenta la intención de artistas como Alipio Jaramillo, que buscaban reflejar una realidad del país que aún sigue latente, y que gracias al arte sobrevive entre los trazos y las voces de quienes ya no están.

Los dos expertos ya habían trabajado en la intervención de una obra religiosa descubierta en la Universidad Externado de Colombia, la cual aludía a la coronación de la Virgen. En ella se usó un método distinto que analizaba las texturas de la obra y rellenaba el color según de la concordancia de cada matiz en la pintura que se podía observar.

Según la profesora Serrano, este es el primer paso en la aplicación de técnicas matemáticas para restaurar una obra como la de Alipio Jaramillo. Además, sienta un precedente para el futuro uso de IA en este campo, desafiando tanto a matemáticos como a restauradores a lograr la mejor intervención posible. Aún se requiere un análisis más detallado para definir el enfoque adecuado.