El presidente de la Comunidad de Murcia, Fernando López Miras, destacó hoy que “la Estrategia de Reactivación Económica y Social en la que trabaja ya el Gobierno regional será la puerta al futuro de progreso y crecimiento que queremos para un millón y medio de murcianos” y aseguró que “esta estrategia, ampliamente consensuada, se apoyará en el análisis y la orientación de los expertos economistas independientes que forman el Grupo Asesor Económico de Expertos”.
Tras reunirse con los miembros que conforman este grupo asesor para analizar el alcance de los ejes estratégicos y de las medidas propuestas por este comité, el jefe del Ejecutivo regional remarcó que “la nuestra es una Región con fortalezas que son auténticas murallas frente a la adversidad” y se refirió a “sectores arraigados y punteros como la agricultura, la industria alimentaria, el sector químico o el del transporte”. Asimismo, apuntó a la creciente presencia en el sector exterior “donde en los últimos diez años hemos duplicado las exportaciones”.
Retos de la Región de Murcia
Entre los grandes retos de la Región, y atendiendo al informe presentado por los expertos, el presidente destacó “la incertidumbre que rodea al sector turístico, el déficit hídrico histórico o la infrafinanciación derivada del actual sistema de financiación autonómica”. En este sentido, apuntó que “es indispensable que, en este camino que emprendemos, nos ayude el Gobierno central y nos trate como al resto de españoles”.
Las aportaciones del grupo asesor servirán ahora para enriquecer la Estrategia Regional para la Reactivación Económica y Social ‘REACTIVÄ2020’, el plan en el que trabaja el Gobierno regional para minimizar el impacto de la crisis sanitaria del coronavirus, iniciar y acelerar el crecimiento económico o avanzar en la cohesión social.
Innovación, digitalización, formación y economía circular
En su informe, los expertos prevén una menor incidencia de la crisis económica en la Región por el importante peso relativo de sectores que se están viendo menos afectados como la agricultura, la industria alimentaria o el transporte. El informe recuerda, además, el mayor dinamismo mostrado por la economía regional durante las fases expansivas de la economía. Así, por ejemplo, la Región fue la comunidad que más creció entre los años 2013 y 2018, con un avance del Producto Interior Bruto (PIB) del 19,2 por ciento frente al 15,4 por ciento de la media nacional.
En el extremo contrario, este análisis recuerda la incertidumbre que rodea al sector turístico, el déficit hídrico de la Región o la infrafinanciación derivada del actual sistema de financiación autonómica, cuya reforma los expertos consideran urgente e imprescindible, como alguno de los condicionantes que pueden lastrar el proceso de recuperación.
Para hacer frente a esta situación, los expertos destacan la importancia de impulsar la inversión y la creación empresarial con medidas de simplificación; el fomento industrial, en especial de las industrias de media y alta tecnología por su elevado valor añadido y por su capacidad para generar empleo de mayor calidad; el incremento de la productividad en sectores como el agroalimentario o el turístico o la diversificación industrial.
Otra de las líneas de transformación iniciadas en los últimos años por la economía regional y cuyo refuerzo resulta de gran trascendencia en las actuales circunstancias es el fomento de la sociedad del conocimiento, la capacidad emprendedora y la cultura de la innovación como vías para mejorar la competitividad empresarial. En este sentido, la inversión en I+D alcanzó en el año 2018 el 0,97 por ciento del PIB, un dato que supone la menor distancia con respecto a la media nacional (1,24 por ciento) desde mediados de la década pasada. Otra de las bases en las que se debe asentar esta economía del conocimiento es la digitalización, un reto que constituye en la actualidad una de las líneas estratégicas del Gobierno regional a través de iniciativas como el proyecto ‘Smart Region’.
Entre los ejes del desarrollo económico, los expertos inciden también en la sostenibilidad como elemento generador de valor económico, ambiental y social. En este sentido, el Gobierno regional ha puesto en marcha una Estrategia de Economía Circular para guiar la transición desde un modelo de economía lineal a otro basado en un sistema de producción responsable, sostenible y más eficiente en el que se apuesta por la reutilización y la conservación del medio ambiente.