Leo Harlem deleitó con cerca de dos horas del mejor humor al público que llenó, este viernes, el Auditorio Municipal Maestro Padilla ante la atractiva propuesta del que es sin duda uno de los rostros más queridos de la escena cómica nacional. El monologuista leonés, que ha saltado a la fama gracias a su participación en conocidos programas de televisión como ‘Se lo que hicisteis’, ‘El club del chiste’ o ‘La hora de José Mota’, arrancó las carcajadas en el patio de butacas con su peculiar visión sobre temas tan comunes como la gastronomía, el deporte de aventura o la convivencia familiar.
A Leo Harlem le gusta la vida tranquila, sin dar una carrera de más, prefiere las croquetas y los torreznos a la nueva cocina de autor y tiene muy claro que los domingos son para descansar y no para dar vueltas sin rumbo en busca de un lugar apacible donde hacer un pic nic. “Propongo que a la salida del teatro organicemos una recogida de firmas contra los deportes de riesgo”, afirmaba antes de comenzar un monólogo muy entretenido sobre planes alternativos para el fin de semana, como el descenso de barrancos o el piragüismo en aguas bravas.
No podían faltar, además, sus ya tradicionales juegos de palabras y la velocidad que le imprime a buena parte de sus gags al más puro estilo de todo un maestro de la escena como Antonio Ozores, que se ha convertido con el paso del tiempo, en una de sus señas de identidad y en su mejor carta de presentación.
Para este espectáculo, que ha recorrido ya buena parte de los teatros españoles, y cuenta con otros genios del humor. En Almería el turno fue para Sinacio, un habitual de la pequeña pantalla con un repertorio extraordinario que le convirtieron en todo un fenómeno social cuando la televisión privada daba sus primeros pasos en España. Fue el primero en actuar y maestro de ceremonias y enamoró al respetable con un análisis de su viaje y estancia en la ciudad.
Cómico de largo recorrido, pintor, mago y presentador, el público almeriense pudo disfrutar de un artista todoterreno capaz de darle giros insospechados a chistes mil veces escuchados y que llenó el escenario de la Avenida del Mediterráneo con largas caminatas en busca de la complicidad de sus seguidores.
Durante todo el show no faltaron los guiños a la provincia, a las costumbres y personajes típicos del panorama almeriense como el cantante ejidense Manolo Escobar. Citaron una de sus más conocidas frases: “Almería, un inmenso coral es tu hermosa bahía” y apostaron por el ascenso de la Unión Deportiva Almería a Primera División. También hicieron diferentes referencias a la costumbre, tan almeriense, de comer migas los días de lluvia.
El fin de fiestas, que fue muy aplaudido, sumó a los dos cómicos sobre el escenario, en una batalla de chistes que puso al público en pie y con la que cada uno de ellos demostró que, de ingenio, van sobrados.
La gente se quedó con ganas de más, y dedicaron a los protagonistas una sonora ovación deseándoles un pronto regreso a las tablas del Auditorio Municipal Maestro Padilla.
