Todas los pueblos son un ‘pequeño mundo’ al completo. Para demostrarlo la Asociación Cultural Talia de Dalías acaba de declarar las ‘Siete Maravillas’ del municipio. Elegidas a través de la votación que han organizado entre vecinos y visitantes -emulando la que recientemente se ha llevado a cabo a nivel planetario-, estos siete puntos conforman una ruta doméstica que viene avalada por los que mejor conocen la riqueza del lugar: sus paisanos. Como ganadora indiscutible, en primera posición, el arroyo de Celín.
Durante los últimos dos meses han sido contabilizados más de tres míl votos en que cada persona podía señalar hasta un máximo de siete opciones de las 21 convocadas. Con 344 votos el arrollo de Celín se ha llevado el mayor reconcomiento. Le siguen la talla del Cristo de la Luz con 335 y la ermita del Aljízar y su torre, con 331.
Ahora la intención de la Asociación es colocar una placa conmemorativa en todas y cada una de las siete maravillas con idea de publicar un tríptico que las incluya y llevar a cabo una ruta por el término municipal que las recorra de cara al próximo curso.
Estás son las 12 primeras candidaturas por orden de votación:
1. Arroyo de Celín
Para quien todavía no conozca las maravillas de Dalías, ahí va una pequeña reseña para invitar a conocerlas.
Arroyo de Celín.
El Arroyo de Celín-Dalías discurre desde Dalías hasta territorio ejidense por el barranco de las Fuentes y la rambla de Almecete. En tiempos del Imperio Romano se establecieron las canalizaciones necesarias para su uso como recurso agrícola de riego.
Actualmente el entorno cuenta con un Área Recreativa ubicada en la Fuente y Arroyo de Celín y a los pies de la Sierra de Gádor se encuentra un área acondicionada para hacer picnic y descansar disfrutando de la naturaleza. En el entorno del Arroyo hay marcados trazados y rutas para realizar senderismo en las estribaciones de la Sierra de Gádor.
La visita es una buena opción para homenajear la vista en un recinto cuajado de árboles, aves y agua. Lo primero que llama la atención en esta especie de remanso de paz es, precisamente, el rumor constante del agua. Un arroyo aparece como el eje que vertebra el encanto del lugar.
Por su parte, un buen número de patos y ocas incrementan el valor estético del lugar, dando forma a una peculiar postal. El agua baja sin tregua desde la sierra evidenciando la existencia de un tesoro líquido escondido bajo tierra. Es el dominio del agua en una provincia vinculada siempre a la aridez.
Talla del Cristo de la Luz.
La actual imagen del Santísimo Cristo de la Luz se venera en la iglesia parroquial de Santa María de Ambrox desde el 3 de mayo de 1939. La imagen del crucificado fue encargada al imaginero sevillano Antonio Lastrucci y costó 4.000 pesetas. Todos los años las peñas coheteras de Dalías se preparan para rendir honores al Cristo de la Luz.
Este año lo harán con una imagen restaurada. La talla presentaba una serie de grietas en el hombro y en la parte de atrás. También se ha trabajado en la pérdida de policromía, algo que puede ser debido al roce, por la cantidad de gente que toca al Cristo.
Ermita de Aljízar.
En el siglo XVII, sobre los restos del oratorio musulmán, se construye la actual ermita de Aljízar. Esta construcción se encuentra en el camino del complejo recreativo de Celín.
Iglesia Parroquial de Santa María de Ambrox. [Años 1501 al 1863]. Esta edificación consta de tres naves y en su interior se rinde culto al Santo Cristo de la Luz. Recientemente este Templo hubo de ser restaurado al sufrir un incendio durante las fiestas en Honor del Santo Cristo de la Luz.
Iglesia Parroquial de San Miguel Arcángel [Siglo XVIII]. Situada en el centro de Celín, en el que se aprecia una arquitectura mudéjar y una bonita torre-campanario. Se reconstruyó tras el terremoto de 1804 y se volvió a edificar sobre sus antiguos muros.
Ermita de la Santa Cruz [Siglo XIX]. Sencilla construcción que consta de una cúpula, sobre cuatro arcos de medio punto y base cuadrada.
Ermita de San Miguel [Siglo XVIII]. Este santuario, hoy en ruinas, fue edificado sobre los restos de una antigua mezquita árabe. Consta de una capilla en la que se encontraban las imágenes de San Miguel y de la Inmaculada.
Iglesia de Celín. El Templo Parroquial de San Miguel fue construido en el S. XVIII. Al igual que ocurriera con la Iglesia de Dalías, también la de Celín fue destruida por el violento terremoto que sacudió la comarca el 25 de agosto de 1804. De los siglos XVIII y XIX se conservan actualmente, en una de sus sacristías, diversos cuadros. Anteriores a la Guerra Civil, sólo permanecen tres imágenes: San Antonio de Padua, pequeña talla en madera; San Tesifón y el Ecce Homo, que sólo tienen de madera la cara.
Fachada del Casino de Dalías (1905). Muestra del poder económico de Dalías durante el período de la minería y de la explotación de la uva de mesa. Este edificio es una construcción de estilo decimonónico. Es el único de Dalías que tiene incoado expediente, como paso previo a la declaración de Bien de Interés Cultural.
También dentro de la arquitectura urbana de Dalías son de destacar sus veinte fuentes, y sus molinos destinados a moler cereal (16 en el siglo XVIII y actualmente abandonados o desaparecidos en su mayoría).
Los Baños de la Reina. Se encuentran en lo que fue la alquería de El Hizán, en la ladera oeste del cerro en el que está la Ermita de Aljízar, y se pueden ver desde el camino que nos lleva al nacimiento de agua de Celín. Están situados en el margen izquierdo de la rambla de Almecete, junto a lo que fue un pantano, seguramente de la misma época, del que sólo se conserva la parte alta, utilizada hoy como camino.
De estos Baños aún se conservan varios de sus muros y parte de su cubierta, siendo, los que mejor se conservan de los que existen en la provincia. El edificio es del S. XIII-XIV. El paisaje que lo rodea es de extraordinaria belleza con numerosos y pequeños bancales de regadío, el pantano árabe y la ermita de Aljízar.
Iglesia de Dalías. La Parroquia de Dalías se fundó en 1501 denominándose Santa María de Ambrox. Cuando en 1568 se produce la rebelión de los moriscos en La Alpujarra, Dalías queda totalmente ocupada, siendo su iglesia destruida. Se construyó de nuevo y el terremoto de 25 de Agosto de 1804 la arrasó por completo. Los cimientos de la nueva iglesia comenzaron a ponerse en 1817 y no se terminó hasta bien entrado el siglo XX. En la madrugada del día 20 de Septiembre de 1993 un incendio volvió a arrasar el templo, destruyendo totalmente el techo, algunos altares e imágenes. El Cristo de la Luz sufrió importantes daños. La restauración del templo comenzó de forma inmediata. En su interior se encuentra la capilla del Padre Rubio, hijo de Dalías, beatificado por el Papa Juan Pablo II en 1985.
Son algunas pinceladas para disfrutar de un completo día turístico. Para complementarlo en los bares de la zona se sirven buenos caldos y tapas.
Más información sobre esta iniciativa y sobre Dalías en la web www.asociaciontalia.org/