La Universidad de Oviedo y Enagás han firmado un convenio de colaboración empresarial que pone en marcha la Cátedra de Desarrollo de Vectores Energéticos Sostenibles. El acuerdo establece un marco conjunto de colaboración que permitirá realizar un estudio técnico-económico para adaptar la terminal de gas natural licuado de Musel E-Hub, en Gijón, como planta multimolécula (e-terminal), lo que permitirá almacenar y gestionar moléculas climáticamente neutras como el hidrógeno verde y sus derivados.
La cátedra desarrollará un estudio de viabilidad de los nuevos vectores energéticos sostenibles, en el contexto de la transición energética, así como la selección de las mejores alternativas futuras para la Planta de Musel E-Hub —participada al 75% por Enagás y al 25% por Reganosa—, como el hidrógeno renovable o el transporte y almacenamiento de CO2, entre otras.
Al acto de firma, celebrado hoy en el Edificio Histórico de la institución académica, han asistido Ignacio Villaverde, rector de la Universidad de Oviedo; Claudio Rodríguez, director general de Infraestructuras de Enagás, Javier Perera, director general de Personas y Transformación de Enagás, e Ignacio Muñumer, director de Organización y Talento de Enagás.
La cátedra, que tendrá un periodo de vigencia de cuatro años, es la primera colaboración a largo plazo en la que las dos entidades promoverán proyectos de I+D y actividades dirigidas a la promoción social de la investigación y el desarrollo tecnológico en este ámbito. Esta nueva cátedra forma parte de las iniciativas contempladas en marco de la Universidad Corporativa de Enagás, que favorecen el desarrollo del conocimiento en el ámbito de la sostenibilidad y la descarbonización.
La compañía Enagás apunta que un 78% de los profesionales que trabajan en la Planta de Musel E-Hub son de Asturias y forman parte de un equipo humano de alrededor de 50 personas. Adicionalmente, la planta genera en torno a 100 empleos indirectos. En julio de 2023, la planta de gas natural licuado (GNL) de Musel E-Hub recibió el acta de puesta en servicio definitiva y, en agosto, atracó en la terminal el primer barco comercial.