La Biblioteca de la Universidad de Huelva ha concedido sus premios anuales a los investigadores con mayor presencia e implicación en Arias Montano, el repositorio institucional de la Onubense en el que los distintos investigadores depositan sus trabajos para que sean de acceso abierto al resto de la comunidad investigadora y de la ciudadanía en general.
Las distinciones fueron puestas en marcha por la UHU en 2020 a través de su Estrategia de Política de Investigación y Transferencia (EPIT), que recoge una mención expresa al Acceso Abierto y a Arias Montano con el objetivo de apoyar la visibilidad de la producción investigadora y el fomento de revistas propias, además de la obligatoriedad de depositar en el repositorio una copia completa de los artículos o trabajos generados bajo el amparo de fondos públicos, tal y como ha explicado la jefa del Servicio de Biblioteca de la Onubense, Isabel Lara Díaz.
Asimismo, también se establece que la Biblioteca convocará los citados premios para reconocer al personal investigador más activo y comprometido con el depósito de sus publicaciones en el repositorio, un reconocimiento que tiene dos modalidades: la modalidad retrospectiva, con la que se reconoce al personal más activo en el repositorio desde la puesta en marcha del mismo, hace ya más doce años; y la modalidad corriente, que reconoce el autoarchivo en 2019.
Este año, los investigadores que han obtenido el reconocimiento han sido Ignacio Aguaded, en el área de Ciencias Sociales, Jurídicas y Humanidades (en las dos modalidades); Juan Gómez Salgado, en el área de Ciencias de la Salud (modalidad retrospectiva); Juan Diego González Sanz, en el área de Ciencias de la Salud (modalidad 2019); y Felipe Jiménez Blas, en el área de Ciencias Aplicadas (modalidad 2019).
El vicerrector de Investigación y Transferencia de la Universidad de Huelva, José Rodríguez Quintero, ha destacado que la Universidad de Huelva apuesta claramente por el repositorio institucional y el Acceso Abierto, pues tanto las fases previas de la investigación desarrollada con fondos públicos como los resultados de la misma “tienen que estar al acceso de todo el mundo”, ha subrayado.
Esta apuesta se realiza además no solo por la propia “convicción” de la Onubense, que también, sino además porque la Unión Europea y las agencias impulsan el Acceso Abierto, ha proseguido Rodríguez Quintero, que ha explicado que, “de hecho, ya no solo la publicación como tal de los artículos científicos, que es el resultado de la primera fase de la producción científica, debe hacerse pública, revisable por todos, sino también todo el proceso”, ha agregado.
En la misma línea se ha manifestado el director de Área de Automatización, Proceso y Producción Científica de la Biblioteca de la Universidad de Huelva, José Carlos Morillo Moreno, para quien “el repositorio contribuye a la difusión y visibilidad de la producción científica de la UHU, que no es un tema menor, y lo hace mediante la incorporación de esquemas de metadatos, vocabularios controlados y protocolos de transferencia e intercambio de la información que hacen que todos los contenidos depositados sean correctamente expuestos”.
Además, “el repositorio es un contenedor para la preservación digital e incluso para el propio investigador e investigadora que tiene sus trabajos allí”, ha continuado Morillo Moreno, para quien este instrumento es también “transparencia institucional y responsabilidad social y proporciona los medios a la institución para que sea más soberana de su propia producción científica”.
El investigador premiado en el Área de Ciencias de la Salud, Juan Diego González Sanz, que ha recibido la distinción en la modalidad 2019, ha destacado que la Biblioteca de la UHU, donde se encuentra el repositorio, es “uno de los mejores recursos que tenemos. El repositorio Arias Montano es nuestra plaza mayor, a la que hasta el alumno que está empezando puede acceder sin gran dificultad, porque la plataforma es amigable, lo que hace que el repositorio sea un sitio cercano en el que la Universidad de Huelva toca tierra en el sitio donde está”, ha subrayado el también director de Antropología Filosófica y Enfermería de la Universidad de Huelva.
Para González Sanz, el repositorio “es además una herramienta poderosa a la hora de preparar un curriculum. Además mide las estadísticas de descarga y visualizaciones, lo que puede hacer que ciertos productos científicos no publicados en revistas puedan tener una medida de su impacto”, ha proseguido, tras lo que ha mostrado su “agradecimiento al equipo de la biblioteca, a la directora y al equipo encargado del repositorio”.
También el catedrático de Ciencias de la Educación de la Universidad de Huelva Ignacio Aguaded Gómez, que ha recibido el premio en las dos modalidades en el Área de Ciencias Sociales, Jurídicas y Humanidades, ha destacado la importancia del repositorio, “un proyecto de la Universidad de Huelva que nos hace señeros a nivel del Estado”, al tiempo que ha agradecido a la UHU este “reconocimiento al acceso abierto, un movimiento mundial de notable importancia porque aspira a que la investigación sea de todos, patrimonio de todos, además de un instrumento fundamental que tienen los pueblos para su desarrollo y avance”, ha subrayado.
Para Aguaded, “la gran apuesta que tenemos que hacer en los próximos años por el acceso abierto es fundamental”. “Ya se hace desde Horizonte 2020, desde la política científica española y desde muchas universidades, entre ellas la Universidad de Huelva, pero se tiene que traducir también en ir construyendo un tejido editorial potente”, ha proseguido el catedrático de Ciencias de la Educación, al tiempo que ha recordado que “España solo representa el 1 por ciento del tejido editorial científico del mundo, que es muy pobre para nuestro potencial investigador y nuestra producción científica”, ha agregado.
Además, Ignacio Aguaded aboga por “conseguir que las producciones a nivel de instituciones públicas tengan el impacto y la calidad necesarias para competir con las publicaciones de carácter internacional que están en pocas manos privadas. Esa es una apuesta importante en la que hay que avanzar en los próximos años”, insiste el catedrático, para quien también “hay que hacer una apuesta fuerte por nuestras revistas, para que la revista de nuestra Universidad aspire a ámbitos de excelencia que por desgracia muchas veces se circunscriben a un tipo de publicaciones que en muchas áreas están en otros países”, ha añadido.
Por último, el catedrático de Física Aplicada de la Onubense Felipe Jiménez Blas, que ha logrado el premio en el área de Ciencias Aplicadas en la modalidad Año 2019, ha subrayado la importancia de los repositorios en abierto “para que nuestros trabajos tengan una visibilidad importante”, ya que permiten a los investigadores de otras instituciones y países acceder perfectamente a esa información y que esos trabajos puedan ser referenciados, lo que a su juicio es “vital” no solo para el investigador, sino también para la institución en la que está, pues los artículos citados en revistas importantes “contribuyen a una mejor financiación y posicionamiento de nuestra Universidad y, por tanto, de nuestra sociedad”, ha resaltado.
Estos repositorios sirven por tanto, a su entender, para contrarrestar una realidad que limita la visibilidad de los investigadores, ya que “en muchas ocasiones otros investigadores tienen que acceder previo pago a esa investigación, y eso es un lastre para ellos y para nuestra visibilidad”, ha lamentado Jiménez, tras lo que ha agradecido a la UHU y a la Biblioteca universitaria esta “distinción y reconocimiento” y ha animado a sus compañeros a “que se unan a este barco”, esto es, al repositorio Arias Montano.