La magistrada Begoña Rodríguez Álvarez ha recibido hoy el Premio UNIA Concha Caballero, concedido por la Universidad Internacional de Andalucía.
Primera mujer en presidir una sala del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), la de lo Social en el año 2016, y también en ser nombrada representante del Poder Judicial en Andalucía occidental, en 2017, ha ejercido en juzgados del País Vasco, Castilla y León, Cataluña y Andalucía.
La magistrada ha comenzado su intervención reclamando que se imponga la cordura y se consiga el respeto a las normas, refiriéndose al conflicto de Ucrania. “Se desangra un pueblo entero, por un vecino más poderoso que ha decidido usar las armas para causar daño y muerte. Con ellos, lloramos todos”, ha reivindicado.
En sus palabras, Rodríguez ha recordado su llegada a los juzgados de Sevilla en 1987, donde fue la primera mujer magistrada. Un hito en el que, sin embargo, ha subrayado que “no tuve que abrir ninguna puerta” pues, antes que ella y en otros lugares, hubo mujeres que ocuparon puestos de responsabilidad.
Así, ha citado expresamente a las magistradas María Jóver, Josefina Triguero, Margarita Robles, Milagros Calvo, María Luisa Segoviano y Lourdes Aristei. Si bien, su reconocimiento ha trascendido el ámbito judicial para alcanzar a todas las mujeres que la han acompañado y arropado a lo largo de su vida. “Con este plantel no me sentí sola nunca”, ha subrayado.
Begoña Rodríguez ha recordado que en sus inicios como juez no existían conceptos como la perspectiva de género y los planes de igualdad. “Pero, aunque no estaban, los términos de la ley ya se tenían en cuenta”. A este respecto, “aprendí de los grandes magistrados a valorar las pruebas con una especial sensibilidad y considerar la existencia difícil que habían vivido muchas de aquellas mujeres”, ha apuntado.
“Hoy contamos con otras leyes, que permiten exigencias de igualdad. No fue fácil llegar hasta aquí, pero la tenacidad y el esfuerzo de quienes de verdad han creído en el potencial de las mujeres lo ha hecho posible”, ha apuntado, si bien “no ha sido bastante un título legal para proteger a tantas mujeres de la violencia machista. Algo no estamos haciendo bien. La represión sola no sirve, hace falta educación desde la infancia, en las escuelas y en las familias”.
La magistrada ha reconocido no creer “en las cuotas, porque relativizan el éxito de las mujeres”. Con ello, “creo en el talento, el esfuerzo y el respeto a los valores básicos del ser humano. De cada persona, y me parece necesario conservar y extrapolar al otro género estos valores. Algunos se consideran femeninos, pero son marca de excelencia”, ha afirmado.
Igualdad de género
El rector de la UNIA, José Ignacio García, ha presidido el acto de entrega que cierra las actividades de la institución para conmemorar el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, y que ha contado compañeros, familiares y miembros del equipo de gobierno de la Internacional de Andalucía.
En el mismo, ha querido poner de manifiesto la desigualdad de género que persiste dentro de los órganos judiciales como el Tribunal Supremo, donde apenas el 22,5% de los magistrados es mujer. Si bien el talento de pioneras como Cristina Almeida, Manuela Carmena o Aurora León, ha referido el rector, ha permitido áreas con “un menor desequilibro” como el Derecho del Trabajo, al que pertenece la magistrada galardonada por la UNIA.
“Más allá de la simbología de las efemérides, es importante dar visibilidad a todas estas mujeres pioneras, aunque muchas de ellas, como Begoña Rodríguez, no hayan sido conscientes de que su tesón, trabajo y perseverancia las ha llevado de manera silenciosa a convertirse en un referente para los demás”, ha apuntado José Ignacio García.
Por otro lado, García ha reivindicado la Universidad como una institución que debe actuar de manera ejemplarizante, en materia de igualdad y en todas aquellas sobre las que sea necesario incidir. “Y subrayo un mensaje que hoy más que nunca creo necesario: no cejemos jamás en la lucha de las causas justas, el conocimiento y la educación son las mejores herramientas para ser libres y críticos, para luchar por la igualdad y reivindicar la paz”, ha apuntado.
El presidente del TSJA, Lorenzo del Río, ha tenido palabras para la galardonada por un “premio muy merecido”, que pone el foco no solo en la magistrada por su labor profesional “también a los valores que hay detrás de la persona, que los que te hemos seguido lo hemos podido ver y que expresan una talla personal que deben ser ejemplo para muchas generaciones”.
Begoña Rodríguez
Nacida en León, casada y madre de tres hijos, Begoña Rodríguez Álvarez es la primera mujer que logró llegar a la presidencia de una sala del TSJA cuando en febrero de 2016 fue designada para dirigir la sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. Ingresó en la carrera judicial en 1980.
Ha ejercido en los juzgados de distrito de Guetxo (Vizcaya), Viladecans (Barcelona) y Arévalo (Ávila). También en varios órganos de Santa Coloma de Farners (Girona), Sevilla y Hospitalet de Llobregat (Barcelona). Y desde mayo del año 2000 es magistrada de la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, en su sede de Sevilla.
Hasta el momento, han recibido el Premio UNIA Concha Caballero Anne Hidalgo, alcaldesa de París, Carmen Linares, cantaora flamenca, Concha Yoldi, empresaria, Adelaida de la Calle, catedrática y primera rectora de la Universidad de Málaga, Carmen Maroto, primera mujer en ingresar y presidir una academia de Medicina en España, y Enriqueta Vila, primera mujer en ingresar y dirigir la Real Academia Sevillana de Buenas Letras.