Teresa Pla fue mujer hasta que, al desnudarse una fría mañana invernal ante la Guardia Civil, y debido a un problema de malformación genital, cambió sus ropas femeninas, y se convirtió en Florencio.
Para unos fue durante quince años una pesadilla fuera de la ley, hasta ser apodado “el terror del Caro” e imputársele 29 muertes. Para otros, era un persona marginada que se enroló en el maquis por el simple hecho de que allí fue aceptada tal cual, además de que allí encontrara su identidad sexual y abandonara su pasado de analfabetismo.
En 1960 fue capturada por la policía andorrana y entregada a las autoridades españolas. Pasó diecisiete años en el penal del Dueso acusado de las muertes de veintiún guardias civiles, siete alcaldes y un ermitaño.
¿Inocente o criminal? Es el misterio que ha tratado de desvelar esta novela, escrita en 1978, una trama desbordante de violencia, amor, sexo y aventura basada en el trabajo de campo que realizó su autor durante tres años y en plena transición política.
La novela, editada por Almuzara, se presenta este jueves, a las 20 horas, en la sede el Instituto de Estudios Almerienses, en un acto que contará con la presencia del autor, Julio Alfredo Egea y José Heras, profesor de Teoría de la Literatura de la Universidad de Almería.