La Fundación Cajamar colabora con Unicef y Médicus Mundi para reducir la mortalidad infantil

Aunque se han realizado avances sustanciales en la reducción de la mortalidad infantil (desde 1990, la tasa de mortalidad de niños menores de cinco años disminuyó de 12,5 millones en ese año, a 9,7 millones en 2010), los datos reflejan sin duda cifras altísimas que nos mantienen lejos de cifras realmente esperanzadoras. La mortalidad de los menores de cinco años continuó siendo muy alta en el Sur de Asia, donde en 2010 aproximadamente uno de cada 14 niños murió antes de los cinco años.

La directora general de la Fundación Cajamar, Carmen Mª Giménez, el presidente de Medicus Mundi Andalucía, Rafael Rodríguez-Contreras, la presidenta de UNICEF Almería, María de Muller y la directora general de Fundación del Valle, María José Cantón han firmado hoy los acuerdos de colaboración para el impulso de acciones a favor del “Objetivo del Milenio de Naciones Unidas 2011: la reducción de la mortalidad infantil”, y han presentado a los medios de comunicación las diversas iniciativas de la campaña a desarrollar durante el año a favor de este reto mundial.

Con la firma del acuerdo, Fundación Cajamar apoyará a UNICEF en sus acciones para la reducción de la mortalidad infantil combatiendo la desnutrición, especialmente en menores de cinco años. Para ello Fundación Cajamar contribuirá con una línea de acción directa de 20.000 euros durante el presente año y el impulso de campañas específicas de movilización de fondos y recaudación de donativos desde todas las oficinas de Cajamar Caja Rural, con la especial implicación de sus empleados, sensibles en pasadas campañas a las acciones a favor de los Objetivos del Milenio.

La desnutrición es a menudo un problema invisible. En muchas ocasiones, solo se detecta cuando se vuelve grave. Una nutrición adecuada comienza incluso antes del embarazo y continúa cuando el niño nace. Hay un momento fundamental para prevenir la desnutrición: los nueve meses de embarazo y los dos primeros años de vida del niño. Son los 1.000 días que pueden cambiar la vida de una persona.

Para reducir la desnutrición infantil es necesario actuar antes y después del embarazo, promover la lactancia materna temprana y exclusiva, suministrar alimentación complementaria y abordar factores como la pobreza, la desigualdad y la educación. Unos 129 millones de niños del mundo en desarrollo tienen un peso por debajo del adecuado, casi uno de cada cuatro. En los países en desarrollo, 1 de cada 6 recién nacidos pesa menos de 2.500 gramos al nacer.

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