El Mediterráneo se ha convertido en un punto de encuentro entre diferentes culturas que comparten un origen dual común. Artistas de diferentes ámbitos como la pintura, la arquitectura y la literatura coincidieron en señalar una forma "mediterránea" de entender la vida que tiene una clara manifestación en las expresiones artísticas. La luz, las formas y la cultura de la calle han influido en la obra del pintor Francisco de la Torre, el escultor Miguel Centellas y el poeta Álvaro Salvador, que participaron en la tarde del martes en la mesa redonda ‘El Mediterráneo y las artes’.
Para los tres participantes en la mesa redonda, el Mediterráneo y la cultura asociada a este entorno ha influido de forma directa en su obra. Un ejemplo claro es el pintor Francisco de la Torre, almeriense de nacimiento y que ha fijado su lugar de residencia en Valencia. De la Torre vuelve a su tierra natal cuando pinta. Para el artista, que en sus inicios reivindicó la pintura frente a las diversas abstracciones artísticas que buscaban incansablemente el concepto frente a la maestría, la iconografía almeriense es la base fundamental de su obra.
De la Torre afirmó que su pintura se articula en torno a tres iconos indiscutiblemente almerienses, como son la casa cubo, típicamente almeriense; las montañas peladas del desierto de Tabernas, por lo abruptas y características; y el agua, que se manifiesta en forma de mar o de aljibe de los campos de Níjar.
En su trayectoria, el pintor ha experimentado una evolución hacia lo conceptual, sin dejar de emplear elementos figurativos. En su obra se establece un diálogo, casi discusión dicotómica, entre los diferentes ambientes: dentro / fuera; tierra / agua; luz / sombra.
A lo largo de su obra, en su mirada hacia su Almería natal, Francisco de la Torre ha tenido a la arquitectura de Guillermo Langle muy presente, hasta el punto de dedicarle una exposición sobre este arquitecto que ha marcado la ciudad con sus edificios.
Otra visión de la influencia mediterránea en las artes la ofreció el arquitecto Miguel Centellas. Durante su intervención demostró lo similar que es la arquitectura popular en los diferentes puntos del Mediterráneo. El blanco, la estrechez de las calles y la estructura de cubo que se va ampliando en función de las necesidades, así como la escasa separación entre lo público y lo privado se encuentran de forma patente en puntos tan distantes como Andalucía, Baleares, Italia, Grecia o Marruecos.
Centellas, que ha obtenido premios de arquitectura por el Instituto de Vícar a la mejor obra de arquitectura en la provincia en el bienio 1988-1989 y por la reforma del Ayuntamiento de Alhama de Almería también a la mejor obra de arquitectura en la provincia 1998-1999, analizó la arquitectura popular almeriense y también la "proyectada", de la que tomó como ejemplo la Universidad Laboral estructurada en torno a los diferentes patios, algo eminentemente mediterráneo.
Por último, el poeta y profesor de la Universidad de Granada, Álvaro Salvador, analizó la influencia mediterránea en la literatura y en la poesía. El autor, que participó en la corriente literaria conocida como la otra sentimentalidad, definió una memoria común en los pueblos bañados por el ‘mare nostrum’ que permite un mayor entendimiento. Como ejemplo personal explicó sentirse menos extraño en cualquier pueblo de la costa mediterránea que en Castilla. Además, habló de Andalucía como el lugar en el que confluyeron las dos grandes culturas como fueron la romana y la musulmana.
Álvaro Salvador no dejó de hablar del Mediterráneo como una zona de conflictos, un lugar que se define también por las grandes guerras ocurridas a lo largo de la historia y que han conducido, en muchas ocasiones, a favorecer la separación entre la orilla del norte y la del sur.
Esta mesa redonda fue el primer acto del festival Alamar 09, que se desarrolla en Almería del 8 al 17 de junio, y que contará con actuaciones musicales de artistas como Raimundo Amador, los mongoles Hosso & Trasmongolia o Maui y los Sirénidos, entre otros.