Cuatro mimos de la compañía “La Duda Teatro” han puesto la gestualidad, que no la voz, a la campaña impulsada por la BUNS “Biblioteca, espacio libre de ruidos”. El objetivo de la misma es invitar a los usuarios de la biblioteca universitaria a mantener un ambiente que propicie el estudio y la concentración y se ha puesto en marcha por las numerosas quejas de estudiantes que critican el ruido que hay habitualmente no solo en las salas de estudio –con gente que cuchichea, sillas que se arrastran, teléfonos móviles que suenan-, sino también en los pasillos y en otras dependencias.
“Los usuarios deben diferenciar la calle del edificio de la Biblioteca, cosa que ahora no ocurre. Queremos que los estudiantes se conciencien que si hablan en voz alta a la puerta de las salas de estudio o incluso en el hall, dentro se escucha todo. Deben entender que la Biblioteca es un espacio de estudio y que hay que ser respetuosos con quienes vienen a trabajar en él. El ruido es uno de los factores que más preocupa a nuestros usuarios y así nos lo han hecho llegar a través de las encuestas de satisfacción que hacemos periódicamente, de ahí la puesta en marcha de esta campaña”, señala Encarna Fuentes, directora de la Biblioteca.
El propósito de la campaña es que toda la Biblioteca sea concebida como un espacio libre de ruidos desde la misma puerta de entrada, y en todas las dependencias: vestíbulo, antesalas, pasillos, etc. Por toda la BUNS ya se han desplegado carteles y pegatinas con el lema “Campaña de concienciación. Silencio, estamos en una Biblioteca. Espacio libre de ruidos”. Hoy también se han repartido bolígrafos y chapas a los estudiantes.
