El escritor e historiador Juan Eslava ha defendido que la sociedad “no puede prescindir de la memoria” y el valor del pasado en los planes educativos, y ha señalado la validez de la novela histórica como un género en cuya autoría “pueden convivir el historiador y el escritor”.
Eslava participa en el curso de verano de la Universidad Internacional de Andalucía Historia y novela histórica, que acoge esta semana el Espacio Santa Clara de Sevilla bajo la dirección de José Calvo Poyato. En él, reflexiona sobre la Sevilla cervantina y la conquista de América. El escritor, Premio Planeta 1987 por En busca del unicornio, ha publicado multitud de textos entre novela, ensayo o literatura de viajes. Apasionado de la Historia y especialista en el medievo, afronta la escritura con la disciplina diaria de levantarse “entre las cuatro y las cinco de la mañana” para dedicar “unas ocho horas diarias” al oficio.
El autor ha defendido la validez de la novela histórica, género en ocasiones cuestionado por su particular relación entre hechos históricos y decisiones artísticas. En su creación, afirma, “hay que combinar el novelista con el historiador”, figuras que “pueden convivir perfectamente”. “Los historiadores españoles gozan de gran prestigio, pero no todos son capaces de ser novelistas. A aquellos que lo son, simplemente no se les caen los anillos por ello”, ha señalado.
“Cada uno tiene que aprender de sus propios tropiezos”, afirma el autor. “El defecto de la novela histórica, o de sus novelistas, es que los autores se documentan tanto que al final pretenden meter todo y terminan cargándose la novela. Eslava admite que a su edad ha podido permitirse, en algún momento, “la boutade de escribir para a continuación documentarme y completar así los huecos necesarios”, algo que mantiene el rigor y ayuda a evitar abusos enciclopédicos.
Respecto a la situación de los esfuerzos por hacer divulgación histórica ante la sociedad, el autor considera que “se han hecho grandes adelantos, sobre todo si comparamos con lo que se hacía hace 40 o 50 años, si bien siempre se puede mejorar”. Por otro lado el escritor, muy crítico con los planes de estudio de las aulas españolas, cree sin embargo que contamos hoy en día con “la mejor generación de docentes que hemos tenido”.
“Lo que no se puede hacer es prescindir de la memoria”, ha reflexionado. “Es absurdo que un niño memorice la lista de reyes godos, como hacíamos en mi generación, pero sí tiene sentido conocer alguno fundamental”. Sobre la enseñanza, ha valorado positivamente la tendencia a “migrar contenidos de una asignatura a otra, como relacionar literatura con historia y esta con la filosofía”, pues hasta ahora los contenidos estaban “demasiado compartimentados”.
El curso, que se presenta en el Espacio Santa Clara hasta el próximo jueves, supone una oportunidad para explorar el tratamiento de la historia desde la novela de la mano de pensadores y autores del género de primera línea. Su programa, amplio y multidisciplinar, indaga en cuestiones como los límites de la libertad del novelista o la relación entre historicidad y cánones estilísticos, acercándose a aspectos como la I República, la huella de Cervantes en Sevilla, la situación de la mujer en Al-Ándalus o los esfuerzos de Elio Antonio de Nebrija por crear una gramática del castellano.
Acompañan a Eslava en el curso un grupo de destacados historiadores y literatos que, bajo la dirección del escritor y doctor en Historia José Calvo Poyato, repasan las claves del género y nuestra relación con la historia y la memoria: el escritor Santiago Posteguillo, el también autor y catedrático de Historia Medieval en la Universidad de Zaragoza José Luis Corral, la escritora y directora del Centro Andaluz de las Letras Eva Díaz Pérez, la doctora y profesora de Historia Moderna en la Universidad de Córdoba Soledad Gómez, el doctor y profesor especialista en Historia Económica de la Universidad de Sevilla Carlos Arenas y la doctora en Historia Medieval y profesora en la Universidad de Sevilla Gloria Lora.