El próximo lunes, la Fundación Eduarda Justo celebra el III Foro del Futuro, que este año se ha titulado ‘El impacto de las redes sociales en nuestra vida personal, profesional y social’, una cita en la que una cincuentena de jóvenes analizarán con la ayuda de una serie de expertos la realidad 2.0. Uno de los expertos participantes es Jorge Juan Fernández, autor del libro ‘Las reglas de juego’ y un gurú a la hora de analizar el cambio introducido en nuestra vida con las redes sociales. Antes de su conferencia, Jorge Juan Fernández ha analizado junto a www.novapolis.es la realidad 2.0 en una entrevista, donde ha planteado las oportunidades que ponen a nuestro alcance las redes sociales y el nuevo modelo horizontal que se ha abierto ante nosotros.
Parece que no todos se han incorporado al mismo ritmo a este modelo horizontal, ¿no?
Yo creo que, como en todas las innovaciones, hay un grupo de gente que lo creen rápidamente, que se ponen a utilizarlo y a hacer cosas con ello; después hay un grupo que lo ven peligroso y lo rechazan. El gran salto se produce entre el primer y el segundo grupo, y creo que ese salto ya se ha dado. Hay mucha gente que se ha dado cuenta de que estas herramientas permiten crear una serie de redes que antes eran impensables. Es la segunda derivada de la revolución de Internet. Lo que ha pasado con las redes sociales es muy distinto a lo que suele ocurrir con la tecnología tradicional. Normalmente, solía pasar que la adopción de la tecnología se producía antes en las empresas y las instituciones que en el gran público, pero en este caso ha ocurrido lo contrario, ha habido una gran irrupción de usuarios a nivel individual y no son muchas las empresas que todavía acaban de creer esta nueva estructura.
Ahora que el usuario se ha convertido en autor, ¿qué ha supuesto este cambio?
Antes había profesionales de la información, periodistas, hoy día, cuando el usuario ha pasado de ser un consumidor de contenidos a ser un creador de contenidos, y cuando pasa esto suceden dos cosas: se incrementa el número de información de calidad, pero también se incrementa el volumen de ruido, de información de mala calidad. Tienes acceso a gente más interesante, que si los sabes descubrir esto supone un valor añadido; pero también hay mucha más gente utilizando esos instrumentos y que sólo generan ruido. Lo que es ruido es diferente para unos y para otros en función de sus intereses. Si yo estoy buscando casa, todo lo que me aparezca en este sentido me será útil, mientras que si no busco casa, toda la información relativa a este hecho es ruido. Es importante la capacidad de discernir. Los usuarios, además de crear contenidos, han pasado ahora a compartir contenidos, a pasarse contenidos, valorar cosas positivamente, etc, y es algo muy importante porque se generan redes en torno a temas de interés.
Los periodistas y los medios de comunicación, ¿cuál será ahora su papel, funcionarán como filtros o interpretadores de información?
El tema de los filtros es muy interesante, porque hay gente que dice que los filtros deben estar en las máquinas y otros que defienden que los filtros deben estar en los humanos. Las máquinas nos ayudan, pero soy partidario de que los últimos filtros sean humanos. Yo creo que los periodistas no han encontrado su nuevo rol todavía; seguramente tiene mucho que ver con que los medios de comunicación no han encontrado su modelo de negocio todavía ante la entrada de Internet y las redes sociales, entonces resulta complicado que los periodistas encuentren su nuevo rol. Cada vez funcionará más la gente que tenga criterio, que serán los que tengan mucho valor, así habrá periodistas con mucho criterio que tendrán valor por la información que buscan, por cómo la sintetizan, por los contactos que ofrecen, etc.
¿Quién se puede permitir el lujo de vivir al margen de las redes sociales?
Se puede vivir al margen y no pasa nada, otra cosa es que se dejan de aprovechar muchas cosas positivas, y pienso por ejemplo en personas mayores, que viven alejadas de las tic y no les afecta negativamente. Pero si lo miramos a nivel de población activa, es complicado quedarse fuera, hay muchos casos en los que esta actitud tiene consecuencias negativas. Pensamos por ejemplo en empresas en las que haya mucha interrelación con el cliente. El usuario habla de las marcas, habla de los productos y las empresas no se pueden quedar fuera; los políticos, que llevaban mucho tiempo fuera y ahora pues se les ha venido encima.
Y las empresas, ¿por qué no acaban de entrar en las redes sociales?
Normalmente estas empresas ven más riesgos que oportunidades, pero hay que pensar en las oportunidades, no sólo en los riesgos. Es evidente que los riesgos existen, en el momento en que tú haces una pregunta, abres un canal estás abierto a escuchar cosas que no te gusten, pero es un feedback, se supone que para las empresas conocer la opinión de sus clientes es un regalo. También deben fijarse en que hay muchos casos de éxitos muy interesantes.
El III Foro del Futuro, de la Fundación Eduarda Justo, se desarrollará este lunes, a partir de las 19 horas, en el Palacio de Congresos de Aguadulce. Para más información, pincha aquí.
