El consejero de Universidad, Investigación e Innovación, José Carlos Gómez Villamandos, ha subrayado en el Pleno del Parlamento que el Centro de Investigación y Transferencia Empresarial–Edificio de Laboratorios de Investigación de la Universidad de Jaén (UJA) “constituirá un ejemplo de colaboración entre universidad y empresa a favor de la transformación económica y la generación de empleo en Jaén”. Además, ha asegurado que la iniciativa reforzará a la UJA como “eje esencial” del desarrollo industrial de la provincia.
La Consejería de Universidad y la Universidad de Jaén firmaron a principios de octubre el convenio por el que la Junta concede 4,8 millones de euros a esta institución académica para financiar la construcción y mantenimiento del futuro equipamiento. Esta actuación, que se lleva a cabo en el Campus de Las Lagunillas, tiene como objetivo crear un espacio de investigación, innovación y transferencia de conocimiento en aspectos relacionados con la investigación básica y aplicada de la UJA. La inversión pública, que se articula mediante una subvención nominativa, se nutre de Fondos FEDER en el marco de la Inversión Territorial Integrada (ITI) de Jaén.
En su intervención Gómez Villamandos ha puesto de manifiesto que, con este proyecto, “se pretende dar respuesta a las crecientes necesidades de servicios especializados que se vienen detectando en el tejido productivo de la provincia”. Asimismo, ha explicado que esta inyección económica se enmarca en la política de apoyo de la Junta a infraestructuras de I+D, innovación y transferencia de conocimiento que resulten claves para desarrollar investigación de vanguardia, así como para el fomento de la innovación y la transición tecnológica en actividades productivas esenciales para la comunidad.
Qué servicios prestará el centro de transferencia de la UJA
La futura infraestructura prestará servicios de alta calidad al tejido empresarial y permitirá el fortalecimiento de segmentos estratégicos, como el olivar o el conformado de plásticos. Además, mejorará los recursos y servicios, no sólo a los investigadores propios y de otras universidades, sino también a empresas de actividades claves para la economía de Jaén que, en la actualidad, los están demandando. Se dará respuesta a sectores como el agroalimentario, la automoción, el transporte, la energía, las tecnologías de la información o el plástico.
La Universidad de Jaén es la responsable de coordinar las tareas de construcción y mantenimiento. Los trabajos comenzaron en mayo de 2021 y se encuentran al 70% de ejecución. En la actualidad están pendientes de culminar la fachada, las labores de pintura y las instalaciones, además de la urbanización. La previsión es que la obra esté concluida a principios de 2023, aunque el convenio establece como plazo máximo para finalizar su edificación el 31 de mayo de ese mismo año.
El edificio en construcción, que cuenta con una superficie construida superior a 4.000 metros cuadrados, albergará tres dependencias. La primera se destinará a un laboratorio-taller de tecnologías de la producción y biotecnología, con el que se pretende potenciar el actual Fab Lab y estará especializado en la producción de objetos físicos a escala. El segundo espacio acogerá un laboratorio-taller de bioingeniería y bioprocesos, orientado a la investigación y transferencia sobre biomasa; mientras que en el tercero se ubicará una unidad de supercomputación que albergará un hardware de computación, compuesto por servidores, clústeres de supercomputación y supercomputadores de cálculo científico. Dicha unidad estará vinculada al Centro de Instrumentación Científico-Técnica de la Universidad de Jaén.
El proyecto se ha diseñado teniendo en cuenta las principales líneas de investigación en las que esta institución académica ha demostrado un alto nivel de competitividad.