Tras consolidar un centro hospitalario y equipar una ambulancia para ofrecer atención sanitaria a los cerca de 15.000 habitantes de la zona de Kikaya (Uganda), en esta ocasión, los profesores del ámbito sanitario de la Universidad Católica de Murcia que han formado parte de la expedición humanitaria organizada por la ONG Worldproyect, se han centrado además en ofrecer educación para la salud a las comunidades locales, “con medidas de prevención, y no solamente reactivas, para tratar la enfermedad antes de que aparezca”, señala Manuel Pardo, vicedecano de la UCAM, quien estuvo acompañado desde la Universidad por Artiom Lijnev, profesor del Grado en Odontología en inglés.
Asimismo, han incorporado nuevos recursos sanitarios a la clínica que les han permitido ampliar su cartera de servicios, por ejemplo, en el área bucodental, además de reponer los desfibriladores instalados tanto en el centro médico como en la ambulancia gracias a la donación realizada por la empresa EGS Emergency Global System.
Los alumnos del colegio y el resto de vecinos de la zona han aprendido las técnicas de reanimación cardiopulmonar, así como los conceptos esenciales para la prevención de accidentes de tráfico, sobre todo de motocicleta, el principal medio de transporte allí, repartiendo además cascos entre la población.
Hay que destacar que esta cooperación internacional no se limita a la ayuda presencial durante el verano. Pese a los cerca de 5.500 kilómetros en línea recta que separan la localidad de Kikaya de Murcia, los profesionales sanitarios y los profesores de la UCAM no pierden el contacto durante todo el año para resolver las dudas que les surgen en el día a día con sus pacientes gracias a las nuevas tecnologías. El pasado año, la Universidad Católica de Murcia donó cuatro gafas de realidad virtual al personal de la clínica, lo que ha permitido continuar con la formación de manera virtual. A estas se han añadido este año otras dos, que estarán en el centro educativo, en donde se ha enseñado los diferentes usos que le pueden dar.