Las excavaciones arqueológicas que se están llevando a cabo en Cartagena, en un solar situado entre las calles Carlos III, San Juan y Juan Fernández, están poniendo al descubierto gran parte del baluarte de traza pentagonal, denominado número 3, así como de la cortina 2-3, pertenecientes a las murallas construidas en el reinado de Carlos III, en el último tercio del siglo XVIII.
Los trabajos han sido visitados recientemente por el concejal de Cultura y Patrimonio, David Martínez, junto a la coordinadora de Patrimonio, Carmen Berrocal, y los arquitectos Bernardino García y Juan José Rubio, así como por los arqueólogos que supervisan las excavaciones, Lorenzo Suárez y Mº José Madrid.
Durante su visita el concejal se ha interesado por las propuestas técnicas de futuro relacionadas con la conservación de la muralla, mostrando la voluntad del Consistorio por incorporar estas estructuras arqueológicas de modo que éstas sean visibles para el público.
David Martínez ha destacado la importancia patrimonial que para la ciudad de Cartagena tiene la Muralla de Carlos III, que rodeaba inicialmente la totalidad del casco antiguo y el Arsenal con una longitud de 4.790 metros de los que se conservan visibles 3.190 metros.
Igualmente ha adelantado la colocación de carteles divulgativos en diversos puntos del trazado de la muralla con la intención de concienciar a ciudadanos y visitantes del gran valor histórico y patrimonial de esta construcción monumental.
Al igual que ocurrió con otros solares de la zona como el de la Lonja, este baluarte y su lienzo están apareciendo con grandes alzados, evidenciando que el frente interior de la muralla no fue demolido como se pensó inicialmente, sino parcialmente enterrado.
La Muralla de Carlos III fue proyectada por los ingenieros militares Mateo Vodopich y Sebastian Feringán que diseñaron para la Plaza Fuerte de Cartagena un sistema de fortificación abaluartado de estilo neoclásico ecléctico compuesto por veinte baluartes y dieciocho lienzos o cortinas.
Desde el Gobierno municipal se considera al Patrimonio una fuente de recursos, donde se generan tanto valores culturales como económicos, por ello está trabajando en todas sus vertientes desde la recuperación del pasado romano a través del Anfiteatro y el Barrio del Foro, hasta épocas mucho más recientes como los Molinos de viento del Campo de Cartagena.