La DANA de Valencia, ¿una catástrofe fruto del cambio climático? Los expertos lo aclaran

La DANA extrema sufrida en el día de ayer en la región sureste de la Península Ibérica pasará a la historia como una de las más destructivas y violentas desde que se tienen registros. La imágenes subidas a las redes de auténticos ríos desbocados arrasando todo lo que se encuentran a su paso ponen los pelos de punta. Y todavía la reacción es mayor cuando se sabe que, por el momento, se ha notificado el fallecimiento de más de 200 de personas. Estos fenómenos de lluvias extremas son cada vez más frecuentes y violentos, y muchas personas se preguntan si esta DANA es consecuencia del cambio climático.

La respuesta a esta pregunta requiere de estudios a posteriori y de análisis más profundos, para analizar todos los datos disponibles sobre este evento de lluvias torrenciales. De esta tarea se encargarán equipos científicos de todo el país, pero mientras llegan los resultados de estos estudios, crece la sospecha sobre la relación del cambio climático con este episodio meteorológico trágico.

¿Esta DANA destructiva se ha debido al cambio climático?

El Meteorólogo Superior del Estado y miembro de la Asociación Meteorológica Española, Ernesto Rodríguez Camino, en declaraciones a SMC España, no confirma que esta DANA se haya debido directamente al cambio climático, pero tampoco lo descarta. El experto afirma que “en términos generales lo que sabemos es que, en un contexto de cambio climático, este tipo de fenómenos de precipitaciones intensas y excepcionales, raras, van a ser cada vez más frecuentes y más intensos y, por lo tanto, destructivos“.

Los fenómenos de lluvias extremas son propios del clima Mediterráneo. Sin embargo, en los últimos años se ha observado un cambio de tendencia. Se ha visto que entre uno y otro evento de este tipo, de carácter tan destructivo, pasaban muchos decenios. “Ahora nos podemos encontrar que los tenemos con más frecuencia y su capacidad destructiva es mayor”.

“Asociar un evento particular como este al cambio climático, es decir, preguntarse que si no hubiésemos tenido cambio climático habríamos sufrido un evento como este, requiere estudios a posteriori y siempre se puede decir en términos probabilísticos, pero no sobre la marcha. Esto es algo que se analizará y estos casos muy destructivos o muy violentos, luego dan lugar a muchos estudios que se hacen en ámbitos académicos y de investigación”, añade Ernesto Rodríguez Camino.

Cambios en la corriente en chorro y más humedad en la atmósfera

En opinión de la directora del Centro Vasco de Investigación sobre Cambio Climático, María José Sanz, también recogida por SMC España, “las atribuciones siempre son delicadas. En términos generales, la corriente en chorro o jet stream debido a los cambios que estamos viendo, por el cambio climático, está teniendo ondulaciones más pronunciadas. Las DANAS son zonas de bajas presiones que se aislan de esa corriente en chorro. Aunque son frecuentes, suceden más en invierno, cuando se producen estas ondulaciones”.

A estos cambios en la dinámica de corrientes se suma que ahora haya más cantidad de agua en la atmósfera, debido a que los mares están más calientes, y por tanto hay más agua disponible para la formación de precipitaciones intensas.

“Habrá que ver qué condiciones se han dado, dónde se ha producido ese aislamiento de bajas presiones o la cantidad de evaporación, entre otras cuestiones. También están los ríos atmosféricos, determinadas corrientes en la atmósfera que transportan el vapor de agua. Hay estudios que indican que fenómenos extremos en California tuvieron que ver con este factor”, añade María José Sanz.