La Universidad de Alicante ha celebrado este jueves, 11 de junio, el Solemne Acto de Clausura del Curso Académico en el Paraninfo. Una celebración con una fuerte carga simbólica, realizado sin público, que se ha podido seguir en directo a través de Internet y a la que tan sólo han asistido el equipo de dirección, equipo decanal y dos profesores en representación del colectivo de docentes que hoy ha recibido el reconocimiento en el marco de la primera edición del programa a la evaluación de la actividad docente.
La intervención del rector, Manuel Palomar, ha comenzado con un minuto de silencio en recuerdo de todas las víctimas de la COVID-19 y con un recuerdo especial para Olivia Manzanaro, trabajadora de la Universidad de Alicante fallecida al inicio de la pandemia. De igual manera, ha rendido un “pequeño homenaje de reconocimiento a la comunidad universitaria, al personal de administración y servicios, al personal docente, al personal investigador, al alumnado y al resto de trabajadores que han hecho posible la continuidad de estudios durante estos meses, y están consiguiendo garantizar la continuidad del curso académico”.
La Universidad de Alicante sigue reivindicando Medicina
El discurso, colofón a un acto excepcional por la situación que atraviesa toda la sociedad, ha servido al rector para volver a poner sobre la mesa la negativa del gobierno valenciano a conceder a la Universidad de Alicante los estudios de Medicina. Palomar ha explicado que “si convenimos que la actual crisis sanitaria tiene un carácter de aviso definitivo, me pregunto en qué han quedado los argumentos de quienes, en la polémica sobre la implantación de Medicina en la Universidad de Alicante, sostuvieron que en España ya había demasiados médicos”. El rector cree que “sería conveniente que la Generalitat Valenciana analizara a través de una comisión de expertos independientes la situación de la sanidad en nuestra Comunitat, analizara el sistema de sanidad, la instrumentación sanitaria, el personal sanitario, la disposición de equipos de protección individual y colectiva, en definitiva necesidades sanitarias para los próximos años”.
La intervención ha servido también para realizar un recorrido de estos últimos tres meses en la Universidad de Alicante y desgranar el futuro que espera a la educación superior en que el rector ha reconocido que “es posible que la docencia presencial haya de verse complementada con un uso de la docencia en modalidad no presencial” y ha apuntado que “para asegurar un comienzo de curso con las máximas garantías, aparte de otras medidas de diversa índole, se necesitarán reforzar las infraestructuras especialmente en el ámbito de las tecnologías de la información y la comunicación, y desplegar acciones de formación en los aspectos técnicos y metodológicos dirigidas al profesorado, al alumnado y al personal de administración y servicios más directamente relacionado con la actividad docente”.
Proseguir las tareas docentes
Palomar ha afirmado que “la Universidad de Alicante tiene razones para sentirse orgullosa de sí misma” ya que “en condiciones sobrevenidas y adversas, ha conseguido proseguir sus tareas esenciales sin graves disfunciones, y se apresta a afrontar el inmediato futuro implementando medidas de seguridad adicionales, y preparándose para un nuevo curso académico, que como ya he dicho anteriormente será presencial, complementado no presencialmente de aquellas actividades que las autoridades sanitarias no recomienden llevar a cabo de modo presencial, lo que requerirá una acomodación progresiva de docentes y discentes en la enseñanza superior y la potenciación de las herramientas tecnológicas que faciliten la docencia combinada”.
El rector ha tenido palabras de agradecimiento a los grupos de investigación de la Universidad de Alicante que “no solo han proseguido con sus tareas en condiciones difíciles, sino que se han implicado en la lucha contra el COVID-19” y al Programa de Voluntariado de Emergencia Social Colectiva, de manera especial a “los 974 voluntarias y voluntarios de la UA que de forma inmediata decidieron implicarse para contribuir a paliar la crisis social derivada del contexto de crisis sanitaria que vivimos”.
Los países ricos lo son «porque invierten en I+D+i»
El discurso ha servido también para reivindicar un mensaje presente en las intervenciones del rector en los últimos años en relación a la inversión en investigación y formación “los países avanzado no invierten en I+D+i porque son ricos, como si se tratara de un lujo prescindible, sino que son ricos precisamente porque invierten en ciencia e investigación y desarrollo, dependiendo el grueso de la investigación básica o inicial de fondos”.
Palomar también ha reivindicado el valor de la enseñanza presencial “la comunicación on line no sustituye ni mejora la comunicación cara a cara”, ha asegurado y también ha añadido que “la presencialidad posibilita el diálogo más allá de las aulas, facilitando el aprendizaje y el desarrollo de vínculos personales y habilidades sociales, y procurando un suplemento de motivación e información gracias al intercambio de conocimientos”. En este sentido, el rector también se ha referido a la presencia de la Universidad de Alicante más allá del campus “somos, por elección e historia, una universidad anclada en el territorio, con sedes y aulas universitarias en todas las comarcas, y que ha pretendido y pretende promover el progreso sociocultural y económico de una provincia que necesita, tanto como el agua que le falta, desarrollar, retener y atraer talento e innovación de todo orden”.
“Debemos hacer un uso cada vez más extenso e intensivo de las herramientas digitales, que se han mostrado extraordinariamente útiles en situaciones de emergencia, y que amplían enormemente el repertorio de recursos para la enseñanza y el aprendizaje. Sin embargo, siempre que la realidad, una realidad en evolución incierta –y la piedra de toque que, finalmente, mide la justeza de nuestras decisiones- lo consienta, nuestro horizonte, por las razones antedichas, deber ser la presencialidad”, ha apostillado el rector en su discurso de clausura del curso académico 2019-2020 en la Universidad de Alicante.
DocentiaUA
La clausura del curso 2019-2020 ha acogido la entrega de los reconocimientos al profesorado que ha obtenido la máxima calificación en el la primera edición del programa a la evaluación de la actividad docente. En total han sido 136 docentes quienes han accedido a la excelencia docente y que, debido a las circunstancias excepcionales, han sido homenajeados de forma virtual.
En representación de todos ellos, la profesora Núria Fernández, del departamento de Derecho Mercantil y Derecho Procesal, y el profesor Augusto Beléndez, del departamento de Física, Ingeniería de Sistemas y Teoría de la Señal, han intervenido en el acto.
El vicerrector de Calidad e Innovación Educativa, Francisco Torres, ha explicado durante su intervención que “este logro se consigue tras haber obtenido las máximas puntuaciones combinando las cuatro fuentes de información del modelo: las encuestas de opinión del alumnado, el autoinforme sobre la propia labor docente, el informe de las personas con responsabilidad académica (director o directora de departamento y director de Centro), y un conjunto de 22 indicadores que buscan valorar las actividades relacionadas con la docencia, como el hecho de dirigir trabajos de fin de grado o de fin de máster o participar en sus tribunales, dirigir tesis doctorales, haber realizado estancias de movilidad, cursos formativos,… en fin todo aquello que forma parte de la actividad docente pero que va más allá de la mera impartición de las clases”.