El informe ‘Familia y Pobreza Relacional’ ha sido presentado mediante videoconferencia internacional por Monseñor Vincenzo Paglia, gran canciller del Pontificio Instituto Teológico Juan Pablo II; Monseñor Pierangelo Sequeri, decano de este Instituto; José Luis Mendoza, presidente de la Universidad Católica de Murcia y vicepresidente ejecutivo del Observatorio Internacional de la Familia, y Francesco Belletti, director del Centro Internacional de Estudios de la Familia.
En la presentación, monseñor Paglia ha recordado que en “diciembre de 2018, el Pontificio Instituto Juan Pablo II, junto con la UCAM y el CISF de Milán, siguiendo la inspiración del Santo Padre decidimos fundar este Observatorio como una herramienta de investigación científica permanente sobre la realidad concreta que las familias viven en diferentes partes del mundo”. José Luis Mendoza ha hecho hincapié en que a través del Observatorio “pretendemos innovar y modernizar la labor que desarrollamos teniendo en cuenta los cambios demográficos, los procesos de internacionalización, la globalización económica, así como las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación”.
Principales conclusiones
En el estudio, que ha sido realizado en España, Italia, Brasil, México, Chile, India, Benín, Líbano, Qatar, Kenia y Sudáfrica, se destaca la dificultad de conciliar el trabajo con la familia, la angustia creciente que provocan las nuevas tecnologías en el seno familiar y el aumento de la desigualdad económica y cultural. Asimismo, recoge la dificultad de las familias para atender a los ancianos, el problema de la violencia doméstica y el aumento del riesgo de pobreza para las familias numerosas.
Baja natalidad
Las dificultades con las que encuentran los jóvenes para acceder al mercado laboral y la frecuente precariedad en el empleo provocan la pérdida de interés por formar una familia, lo que incide en la baja natalidad acuciante en muchos países, como en España.
Ruptura de la pareja
Este conflicto genera vulnerabilidad y con frecuencia empobrecimiento económico. Ante ello el Observatorio aboga por trabajar en la prevención de las rupturas y, cuando se produzcan, ayudar en la gestión educativa de la paternidad y propiciar grupos de apoyo a los hijos.
En España
El documento también resalta que hay 4,1 millones de personas en situación de grave exclusión social en nuestro país; el 33% pertenecen a familias numerosas, el 28% a monoparentales, y el 21% de todos los hogares con niños padecen esta circunstancia. Además, el estudio alerta de que en España existe un problema de violencia doméstica y ante la situación económica actual advierte del riesgo de que se reproduzcan las consecuencias de la crisis económica de 2008, en la que más de medio millón de hogares se mantenían gracias a las pensiones de sus ancianos y discapacitados.
En consonancia con los ODS
Para realizar este trabajo, que está en conexión con algunos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas para el año 2030, se han tenido en cuenta ocho áreas de interés y más de 100 indicadores estadísticos, en torno a demografía, familia, salud, educación, economía de ingresos, negocios- comercio – tecnología, trabajo y pobreza.