El Museo del Ejército, en Toledo, acoge hasta el 27 de febrero la muestra “GALDÓS: La Guerra de la Independencia a través de los Episodios Nacionales”, y una de las piezas que hilan el relato expositivo es la réplica del águila (figura de bronce que iba sobre mástil de madera para bandera) de la Primera Legión de Reserva napoleónica capturada en 1808 en la batalla de Bailén y patrimonio de la Real Hermandad de Santa María de la Victoria (Málaga).
Fue donada a la hermandad por la Asociación Teodoro Reding el 8 de septiembre de 2011, día de la Patrona de Málaga, y depositada en el Museo del Santuario recuperándose así el reconocimiento que se hizo a la ciudad de Málaga el mismo año de 1808 por su contribución a aquella primera victoria en campo abierto sobre un Cuerpo de Ejército napoleónico en toda Europa. Un importante hecho histórico en el que intervinieron los regimientos de la guarnición malacitana así como voluntarios, y no sólo eso: el general que mandó las tropas españolas en la batalla fue el gobernador y corregidor de Málaga, Theodor Reding.
¿Cómo llegó el águila a Málaga y el porqué de la réplica?
De entre las enseñas que los generales Dupont y Vedel entregaron al ejército español, destacaban cuatro águilas. Dos de ellas pertenecían a la Guardia de París, una al 4º Regimiento suizo al servicio de Napoleón y la última a la 1ª Legión de Reserva.
La mayoría de los trofeos tomados a los galos, incluyendo las tres primeras águilas, se depositaron en la Real Capilla de la Catedral de Sevilla por orden del general Francisco Javier Castaños, que ofreció la victoria de Bailén a San Fernando.
Sin embargo, el cuarto águila llegaría Sevilla después de aquella ceremonia, y su Junta decidió enviarla con “jinetes de honor” a Málaga por el importante papel que había tenido en la llamada Campaña de Andalucía, recibiéndola el Corregidor Regente Justo Martínez de Baños en ausencia de Reding. Ésta sería colocada solemnemente junto a otros trofeos para el recuerdo y triunfo de nuestros soldados en la Iglesia de Nuestra Señora de la Victoria en la tarde del 7 de septiembre de 1808.
Pero sería así por poco tiempo, pues a principios de 1810 las tropas napoleónicas vuelven a entrar en Andalucía. Halladas las enseñas en Sevilla, el Cabildo de dicha ciudad se ve obligado devolverlas a los franceses pero, antes de ser enviadas a París, se les añade el águila de Málaga encontrada por el general Horace Sebastiani tras la ocupación de la ciudad el 5 de Febrero de 1810.
Se desconoce qué ocurrió con el águila tras su llegada a Francia, pero seguramente debió pasar al Museo de Artillería de Santo Tomás donde sería destruido junto a otras banderas la noche del 30 de Marzo de 1814 para evitar su captura por parte del ejército prusiano.
La réplica del águila estuvo presente en la inauguración de la estatua de Reding, impulsada por la asociación de su nombre y obra del escultor malagueño Juan Vega Ortega, que tuvo lugar en octubre de 2019 en la Plaza de la Malagueta.
Fuente: José Antonio Sierra Lumbreras.