El Ayuntamiento de El Ejido y el grupo de investigación ‘El Legado de la Antigüedad’ recibe uno de los Premios del Consejo Social. El grupo de investigación está dirigido por el catedrático José Luis López Castro, y tiene a Carmen Pardo como responsable del proyecto.
El yacimiento arqueológico de Ciavieja, en El Ejido, es una auténtica enciclopedia para conocer la prehistoria y las distintas sociedades que allí habitaron desde el Neolítico (3.000 años Antes de Cristo) hasta la Época Tardorromana (siglo tercero D.C.). Por eso, el Ayuntamiento de El Ejido adjudicó al grupo de investigación ‘El Legado de la Antigüedad’ el proyecto de excavación, investigación y puesta en valor para abrir al público el parque arqueológico de la antigua ciudad romana de Murgi. Una colaboración que ha sido reconocida por el Consejo Social de la Universidad de Almería, que preside Mariola Hidalgo, en su segunda edición, con el ‘Premio a las entidades e instituciones que se distinguen por contribuir a la transferencia de conocimiento, o actividades desarrolladas con la UAL’.
El proyecto se financia con fondos FEDER (80%) y por el Ayuntamiento de El Ejido (20%) y se está ejecutando por medio de un contrato de investigación con la Universidad de Almería. Está dirigido por la profesora Carmen Pardo Barrionuevo, del Departamento de Geografía, Historia y Humanidades y se integra en las actividades del Grupo de Investigación HUM741 ‘El Legado de la Antigüedad’, del que es responsable el catedrático José Luis López Castro, contando con un amplio equipo de más de una decena de investigadores internacionales.
Carmen Pardo Barrionuevo explica las distintas etapas del proyecto: “nos adjudicaron el contrato de investigación justo antes de la pandemia y después del confinamiento empezamos a trabajar. Actualmente estamos en la fase de excavación, investigación y restauración de los restos emergentes. Pensamos acabar este mes, tenemos más de 700 metros cuadrados de excavación arqueológica distribuida en dos cortes. Uno justo al lado de donde apareció el famoso mosaico en el año 1985, de unos 80 metros cuadrados (10 x 8 m), y otro de 30 x 20 m. donde hemos hallado un complejo termal del que no hemos exhumado la planta completa, pero tenemos identificadas algunas salas, sobre todo por la funcionalidad hidráulica que nos marcan los pavimentos, alguna canalización interna, y unos muros dobles que funcionarían como zona de caldarium de esas termas”. Carmen Pardo afirma que “estamos retirando los niveles de amortización de época romana y excavando las zonas donde no se conservan estructuras romanas, sobre todo para documentar cronológicamente la continuidad de la población en el cerrillo de Ciavieja”.
La segunda fase consiste en la investigación de los materiales y enviado de muestras al laboratorio, y los restos orgánicos van a otros laboratorios de España y el extranjero.
La tercera fase es la puesta en valor del yacimiento. La directora del proyecto asegura que “cuando tengamos los primeros resultados haremos la panelería de las dos zonas de actuaciones y el recorrido que propondremos para el visitante. El espectador podrá ver los restos desde arriba”. Además de su valor histórico, Carmen Pardo destaca su potencialidad turística, pues es un yacimiento que se encuentra en el entorno urbano, y el visitante podrá continuar con compras o gastronomía en El Ejido. Es un recurso muy atractivo desde el plano cultural y turístico”.
El grupo de investigación ‘El Legado de la Antigüedad’ también está abordando el reto de la transferencia a la sociedad de su trabajo en el Yacimiento de Ciavieja y “desde que empezamos nos hemos volcamos en las redes sociales. Cada semana publicamos tres o cuatro post, y, además subimos vídeos al canal de youtube sobre los procesos de investigación. Por último, una vez al mes abrimos el yacimiento para explicar a los ciudadanos los procesos de trabajo que se están realizando en el propio sitio”. Un proyecto que concluirá en abril de 2022.
Sobre la II edición de los Premios del Consejo Social de la UAL
El Consejo Social de la UAL creó el año pasado unos premios con los que quiere reconocer públicamente la contribución del personal docente, investigador, de administración y servicios, y estudiantes de la UAL, así como las empresas, a la prosperidad de la Universidad y la sociedad almeriense en su conjunto. En esta línea, el Consejo Social, que preside Mariola Hidalgo Martínez, ha resuelto la segunda edición de los Premios del Consejo Social 2020, los ‘premios nobel’ de la Universidad, con siete galardonados repartidos en seis categorías. “Queremos poner en valor el talento que existe en la UAL, y la transferencia de conocimientos a las empresas en beneficio de la sociedad almeriense”, afirma Mariola Hidalgo.
Los galardonados de esta segunda edición de los Premios del Consejo Social de la UAL son: ‘Premio al Espíritu Universitario y Valores Humanos’, para el biólogo Ginés Morata; ‘Premio a la Trayectoria de Jóvenes Investigadores’, para José Luis Blanco Claraco y Lucía López Rodríguez; ‘Premio a los Institutos Universitarios y Grupos de Investigación’ para el Grupo de Investigación FQM376, Advanced NMR Methods and Metal-Based Catalysts; ‘Premio a Departamentos de la UAL, para el Departamento de Enfermería, Fisioterapia y Medicina; ‘Premio al Personal Universitario que destaque por su contribución el desarrollo social, económico o medioambiental de Almería’ para Pilar Flores Cubos; y, por último, el ‘Premio para las Empresas o Instituciones que se distingan por su Transferencia de Conocimiento’ se ha concedido al Ayuntamiento de El Ejido y al grupo de investigación ‘El Legado de la antigüedad’.