El Centro Cultural Juan Goytisolo acoge, el 26 de novimbre a las 19:30 horas, un acto de solidaridad con Palestina, ‘Derribemos el muro del silencio’ en el que activistas de Amnistía Internacional explicarán la situación -la franja de Gaza se encuentra en una situación extrema, aislada y con el agua racionada por Israel- y las campañas de solidaridad que están llevando a cabo. La charla estará precedida por una intervención de integrantes del Foro Social de Almería, organizador del acto, que explicarán las actividades que se están preparando para este año.
Según afirma Amnistía Internacional, Israel raciona el agua, que es un derecho humano, a la población palestina, por lo que la población palestina de los Territorios Palestinos Ocupados (TPO) no tiene acceso a un suministro de agua adecuado y seguro. Esto ha entorpecido sobremanera el desarrollo social y económico de los TPO y negado a muchas comunidades su derecho a un nivel de vida digno.
El consumo palestino de agua rara vez alcanza los 70 litros diarios por persona, muy por debajo del mínimo diario de 100 litros per cápita recomendado por la Organización Mundial de la Salud. En contraste, el consumo diario per cápita israelí es cuatro veces superior.
La desigualdad es aún más pronunciada entre las comunidades palestinas y los asentamientos israelíes ilegales establecidos en los TPO. Hay zonas de Cisjordania en las que los colonos israelíes utilizan hasta 20 veces más agua per cápita que sus vecinos palestinos. En el informe ‘Israel/ OPT Troubled Waters: Palestinians denied fair access to water’ se revela hasta qué punto el carácter discriminatorio de las políticas y prácticas hídricas de Israel niega a la población palestina su derecho al agua.
El impacto de la escasez de agua y los malos servicios de saneamiento de los TPO hacen mella en las comunidades más vulnerables, que son aquellas que viven en zonas rurales aisladas y en campos de refugiados superpoblados. Las comunidades rurales a las que no llega la red de suministro de agua dependen de la recogida de agua de lluvia para cubrir sus necesidades domésticas y agrícolas.
En Gaza, entre el 90 y el 95 por ciento del suministro de agua está contaminado y no es apto para el consumo humano. Israel no permite llevar agua desde Cisjordania, y el acuífero costero se va agotando cada vez más debido a la sobreexplotación y a la contaminación de las aguas residuales. El bloqueo impide las reparaciones y la reconstrucción de las maltrechas instalaciones de la franja de Gaza.
Para denunciar esta situación, tendrá lugar este acto de solidaridad con Palestina, que comenzará a las 19:30 horas con una presentación de las actividades del Foro Social de Almería y continuará con una charla a cargo de Amnistía Internacional, ‘Acceso al agua de la población civil en los Territorios Palestinos Ocupados’.