Según un estudio centrado en dos especies de plantas del género Carex y liderado por investigadores de la Universidad Pablo de Olavide, las predicciones son “preocupantes” ya que indican una reducción significativa de la distribución potencial de las dos especies e incluso la extinción de una de ellas, así como cambios en su diversidad y estructura genética
Los resultados de esta investigación pueden contribuir a una planificación apropiada de las medidas para la conservación de la biodiversidad frente al cambio climático, consiguiendo mediante la protección de especies ecológicamente claves un efecto paraguas para la conservación de sus hábitats
Los investigadores del Área de Botánica de la Universidad Pablo de Olavide Carmen Benítez Benítez y Santiago Martín Bravo, en estrecha colaboración con los investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid María Sanz Arnal y Pedro Jiménez Mejías y la investigadora de la Universidad de Sassari en Cerdeña Malvina Urbani han publicado recientemente un estudio cuyos resultados pueden suponer una contribución significativa en el campo de la conservación de la biodiversidad.
En el trabajo, los investigadores realizan predicciones de las respuestas de especies vegetales de importancia ecológica frente a distintos escenarios de cambio climático (estas respuestas están medidas como cambios en su distribución potencial y en su diversidad y estructura genética). Para ello han utilizado dos especies del género Carex (Cyperaceae) que por su dominancia en los hábitats que ocupan los caracterizan, por lo que tienen una importancia clave para su funcionamiento, y pueden ayudar a evaluar el impacto del cambio climático sobre los ecosistemas. Además, dichas especies están distribuidas exclusivamente en el Mediterráneo Occidental, una de las regiones del planeta donde los efectos del cambio climático se prevén más severos.
“Nuestras predicciones son preocupantes, pues indican una reducción significativa de la distribución potencial de ambas especies bajo todos los escenarios de cambio climático, que incluso podría provocar la extinción de una de las especies en los escenarios más severos”, explican los investigadores. “Además, inferimos cambios importantes en la diversidad y en la estructura genética de ambas especies”, añaden.