El Centro Internacional Santander Emprendimiento (CISE), la Asociación RED GEM España, la Fundación Rafael del Pino, Banco Santander, a través de Santander Universidades, y ENISA han presentado esta mañana el Informe Global Entrepreneurship Monitor (GEM) España 2017-18 con la información más reciente sobre el ecosistema emprendedor español.
Elaborado por más de 150 investigadores de todo el país con datos obtenidos a partir de 25.000 encuestas a la población de entre 18 y 64 años y entrevistas a expertos nacionales, este informe recoge las principales características de la dinámica emprendedora de nuestro país y en esta edición incorpora un monográfico sobre Empresas Basadas en el Conocimiento y otro sobre Nivel tecnológico de las iniciativas emprendedoras.
La primera conclusión del estudio es que la Tasa de Actividad Emprendedora (TEA) española– que mide las iniciativas con menos de 3,5 años de vida en el mercado-, ha aumentado un punto con respecto al año anterior (del 5,2% al 6,2%) y, por primera vez en 8 años, ha superado el umbral del 6%, acercándose a cifras anteriores a la crisis (7,6% en 2007). A pesar de este incremento, el índice en España sigue estando por debajo de la media europea (8,1%), aunque supera a economías como Francia (3,9%), Italia (4,3%) o Alemania (5,3%).
La tasa de negocios consolidados (con más de 3,5 años en el mercado) también ha crecido, situando a España (7%) en la media de Europa y por encima del total de las economías impulsadas por la innovación. A su vez, presenta un porcentaje menor de abandonos empresariales que la media de los países de su mismo nivel de desarrollo (1,9% frente al 2,9%).
Respecto a las motivaciones a la hora de crear un negocio, el 68,5% de las personas lo hace porque detecta oportunidades en el mercado, mientras que al 28,3% lo impulsa la necesidad. Si bien las cifras de personas que emprendían motivadas por necesidad antes de la crisis representaban sólo el 15% de la actividad emprendedora total, los porcentajes actuales del emprendimiento por oportunidad se puede considerar estables (en torno al 70% desde 2010).
Brecha de género cada vez más estrecha
La TEA presenta una participación masculina relativamente mayor que la femenina (55,1% frente 44,9%); no obstante, la brecha entre hombres y mujeres a la hora de emprender viene disminuyendo de forma continua desde 2012. Actualmente, 8 mujeres inician negocios por cada 10 hombres españoles, una cifra que supera a la media de Europa, donde sólo se cuentan 6 mujeres por cada 10 hombres emprendedores.
Las diferencias de género se acentúan en torno a los negocios consolidados que lideran hombres (60%) frente a los que están bajo la dirección de mujeres (40%), aunque se equipara en lo que respecta a personas que esperan crear un negocio en los próximos tres años (50,9% de hombres frente a 49,1% de mujeres) y cambian a favor de las mujeres cuando se trata del abandono de negocios, lo que sucede en el 52,6% de los casos cuando los lideran hombres.
El informe refleja un incremento en las percepciones de oportunidades de negocio entre los españoles: el 32% afirma que percibe buenas oportunidades (el mayor índice desde 2005), un dato positivo si se las considera un antecedente de las decisiones para emprender. Sin embargo, este indicador -directamente vinculado a la capacidad innovadora de los países-, sigue estando por debajo de la media europea (42%) y muy alejado de Norteamérica, donde supera el 60%.
En cuanto a las percepciones sobre sus capacidades para emprender, el porcentaje de españoles que considera que posee las necesarias se mantiene en torno al 45%, y cuatro de cada diez encuestados señalan el miedo al fracaso como un condicionante para el comportamiento emprendedor. En ambos indicadores las percepciones son similaresa la de los países con modelos de desarrollo semejante.
Si bien el índice TEA ha aumentado, la orientación a la innovación y las expectativas de crecimiento de los nuevos negocios son modestas. Casi la mitad de estas iniciativas se concentran en el sector de ventas, retail y servicios, y nacen, en su mayoría, en forma de autoempleo: en España menos de la mitad de los emprendedores (el 42%) considera generar empleo, y sólo un 9% espera contratar 6 o más empleados en los próximos cinco años.
El grado de innovación, que según GEM se da cuando una iniciativa emprendedora ofrece un producto o servicio nuevo para el mercado, se mantiene estable desde la perspectiva de los emprendedores (en torno al 35%). Si se consulta a los clientes, un 25% afirma que los emprendedores generan productos innovadores, por debajo de la media europea (28%).
Las principales recomendaciones de los más de 600 expertos consultados van orientadas al diseño de políticas gubernamentales que reduzcan las cargas fiscales y la burocracia para las nuevas empresas, que favorezcan la formación en emprendimiento y que impulsen el desarrollo de instrumentos financieros públicos y privados orientados a la creación de nuevos negocios.
Global Entrepreneurship Monitor (GEM) es la red mundial más importante sobre investigación en emprendimiento. El observatorio nació en 1999 de la mano de London Business School y BabsonCollege y su objetivo es proporcionar información clave sobre la relación entre emprendimiento y desarrollo económico que facilite la toma de decisiones.
En el marco de este proyecto global, la Asociación RED GEM España es el equipo nacional que más encuestas aporta al proyecto mundial gracias al apoyo de CISE, de 90 instituciones y empresas y del patrocinio de Banco Santander, a través de Santander Universidades, de la Fundación Rafael del Pino y, desde este año, de ENISA.