Francisco Oliva ha presentado el nuevo centro de investigación de la UPO, que comenzará su andadura oficialmente en el próximo mes de julio, con el fin de impulsar las energías renovables, la protección del patrimonio natural e histórico, el desarrollo de nuevos nanomateriales y la mejora de procesos en biotecnología ambiental y sanitaria.
La nanociencia y la nanotecnología están abriendo nuevas posibilidades para la sostenibilidad, tanto en el campo energético como en el de la eficiencia en el uso de recursos y materias primas. La Universidad Pablo de Olavide unirá el conocimiento científico y las instalaciones de varios de sus grupos de investigación en el Centro de Nanociencia y Tecnologías Sostenibles (CNATS). El rector de la Universidad Pablo de Olavide, Francisco Oliva, ha presentado el nuevo centro de investigación de la UPO, en una mesa redonda que ha tenido lugar en la sede de la Universidad en la calle Laraña, y en la que ha participado el comité científico asesor externo del CNATS, compuesto por doce investigadoras e investigadores de diversas instituciones españolas y europeas.
CNATS nace con el objetivo científico de generar conocimiento para el desarrollo de nuevos materiales y tecnologías con aplicaciones energéticas, medioambientales y biotecnológicas sostenibles. Se trata pues de un centro con vocación de proyección social y gran capacidad para el impulso del sector productivo, ya que enlaza ciencia fundamental con la transferencia tecnológica y la creación de nuevas empresas.
CNATS cuenta con personal científico que, en una evolución lógica de sus progresos y trayectorias, unen su experiencia internacional en campos como la Química Física, la Ingeniería Química, la Física de Materiales, la Biotecnología, la Inteligencia Artificial (IA), y la ética de las tecnologías emergentes. Esta red multidisciplinar desarrollará líneas de investigación para el desarrollo de nuevos materiales para energías renovables; el diseño con la ayuda de la IA de materiales nanoestructurados con aplicaciones en química sostenible; la separación y almacenamiento de productos químicos; el estudio molecular de compuestos con interés medioambiental; la eliminación de contaminantes o la protección del patrimonio histórico; y el uso de nanomateriales en biotecnología ambiental y sanitaria.
El rector de la UPO ha destacado el potencial del nuevo centro de investigación, la actualidad y proyección de futuro de los problemas científicos abordados y su ambición por proporcionar a la sociedad herramientas para la sostenibilidad, basadas en materiales accesibles de manera universal.