Camino Viejo de Almería: la vía que pudo comunicar Portus Magnus con la Turaniana romana clama por su recuperación para seguir vivo uniendo ciudades

Artículo de Ginés Valera. jurista, y miembro del IEA [Instituto de Estudios Almerienses]. Entre 2011 y 2015 ha sido Jefe del Departamento de Geografía y Ordenación del Territorio del Instituto de Estudios Almerienses IEA. Es una de las voces más activas en la defensa del patrimonio histórico almeriense

Entre Almería y Aguadulce, en el extremo sureste de la costa mediterránea española, se encuentran tramos en pie de lo que ha sido durante milenios la principal vía de comunicación entre la capital de Almería con las poblaciones del Poniente. De origen posiblemente romano, la vía ha ido sufriendo transformaciones a lo largo de su historia. Las más importantes las que acabaron con su abandono y destrucción siendo amputada por las sucesivas vías modernas de comunicación que la sustituyeron. Hoy especialistas como Ginés Valera, autor de este artículo, reivindican la recuperación de este elemento patrimonial que serviría como recurso turístico y para la práctica de actividades saludables antes de que nuevas infraestructuras, como el tercer carril de la A-7, lo sigan destruyendo aún más.

Desprotección del Camino Viejo

Actualmente se está tramitando por parte de la Dirección General de Carreteras del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana la futura ejecución de un tercer carril por calzada de la autovía A-7 del Mediterráneo. Tramo: enlace 429 – enlace 438, correspondiente al tramo entre Roquetas de Mar y Almería, así como por la Autoridad Portuaria de Almería la mejora del acceso al Puerto de Almería. Situación: Carretera AL-14 de acceso al Puerto de Almería y N-340 entre la Boca Este del túnel de Bayyana Sur y la Glorieta de Pescadería de Almería.

Preocupa a los patrimonialistas que el conocido como “Puente de Bayyana” del Camino Viejo no figure aún en el vigente Catálogo de Bienes Inmuebles Protegidos por PGOU de Almería como patrimonio etnológico, ni tenga declaración como Bien de Interés Cultural ni siquiera inscrito en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz. Tan solo aparece el Puente de Bayyana en el Repositorio de Activos Digitales del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico gracias a mi perseverancia.

Pese a su evidente valor histórico, patrimonial y paisajístico, tanto el Camino Viejo y su entorno como el Puente de Bayyana padecen escasa atención de los eruditos y carece de monografía, salvo estudios puntuales, como son: Inventario Histórico de los Puentes de Andalucía: Almería, elaborado en 1988 por la Cátedra de Estética de la Ingeniería, Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de la Universidad Politécnica de Madrid; el Padre Tapia; Lorenzo Cara; Jesús Escámez y Acción por Almería; Juan Alberto Cano; Rodolfo Caparrós y los Investgadores del Grupo Abdera de la UAL Patricia Ana Argüelles, Enrique Aragón Núñez y María Juana López Medina.

Relación con el Itinerario Antonino

Trabajamos con la hipótesis de que la antigua calzada romana del Itinerarium Provinciarum Antonini Augusti conocido como Itinerario Antonino o de Antonio Augusto Caracalla, que unía Portus Magnus con Turaniana tuviera su trazado más o menos coincidente con este posterior Camino Viejo de los acantilados de la Sierra de Gádor, aunque al día de hoy no se haya manifestado ningún miliario, documento, plano, monografía o prospección o excavación  arqueológica que lo confirme plenamente, tan solo cierta inuición atendiendo a distancias y algunos vestigios cerámicos romanos. Incluso pudiera tener un origen remoto con la Vía Heraclea.

Consecuentemente, también se mantiene como hipótesis que el Puente de Bayyana del XVIII puediera tener algún componente romano o al menos haber sustituido a algún Puente romano que también salvara el barranco de San Telmo.

Estado de conservación ruinoso de muchos de sus tramos. Foto: Ginés Valera.

El Itinerario Antonino, obra anónima del siglo III d.C., recopila XXXIV calzadas existentes en la Hispania romana con las distancias en millas (milia passuum o mil pasos romanos que equivalían aprox. a 1.481 metros) entre sus mansiones (especie de ventas para pasar la noche o avituallarse en el viaje).

El Itinerario Antonino sitúa en el trayecto de la vía Augusta que conectaba Castulo (hoy Linares) a Malaca (Málaga), una calzada romana que unía Acci (Guadix) con Alba (Abla) en XXXII m. p. y continuaba hasta la Civitas de Urci (El Chuche, Benahadux) en XXXVIII m. p., atravesando el Vicus de Portus Magnus (Almería), dirigiéndose al Vicus de Turaniana (Aguadulce) hasta llegar a Murgi (Cíavieja, El Ejido), desde donde proseguía su destino a Abdera (Adra) Saxetanum (Almuñécar) y otros asentamientos malacitanos, siendo un nexo de conectividad entre las Provincias romanas Baetica y Tarraconensis:

Fijándose, por tanto, una distancia entre Urci y Turaniana (situada en el palmeral de Aguadulce en la costa, Ribera del Algaida) de 16 millas romanas: aproximadamente los 23 quilómetros que separan los Yacimientos hoy en día.

Por su parte, en la obra “Descripción de España”, Abu-Abd-Alla-Mohamed-Al- Edrisi, siglo XII, menciona que se podía ir de Almería a Málaga por tierra y por mar: ” la primera de estas vias describe muchos rodeos; la distancia es de 7 jornadas”. Y que entre Berja y Almería la distancia era de una jornada.

Muros de contención en el Camino Viejo. Foto: Ginés Valera.

Camino Viejo del Roquetas del siglo XVIII

El conocido como Camino Viejo de Roquetas del siglo XVIII o al Poniente, concretamente el tramo que arranca hoy en día del Barranco Greppi en Pescadería y Calle Camino Viejo (por la Puerta del Socorro en la Almería medieval amurallada tras travesar la Vía Real de Pechina) y acaba por los altos del acantilado de la Sierra de Gádor hasta la cantera de donde se extrajeron los bloques de la escollera del Puerto Deportivo de Aguadulce en barranco del Cañarete (y desde allí bajaba zigzagueando hasta encontrar la fuente de Aguadulce) es un antiguo camino de herradura y carretero que comunicaba la capital con los pueblos de Poniente hasta que aproximadamente en 1893 el Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos José Trías Hernaiz trazó la Carretera de Segundo Orden de Málaga Almería (después carretera de Málaga, hoy Nacional 340) y partir de entonces al antiguo camino se le empezó a llamar Camino Viejo, para diferenciarlo del otro más moderno, ancho y sin pendientes, apto para que se cruzaran dos vehículos.

En el mapa de Tomás López del Reino de Granada (1795), Mapa de Almería de Coello de 1855 y en el Mapa Itinerario Militar de España (1865) está registrado. Rodolfo Caparrós ha encontrado que el Anuario Militar de 1820 describe el “camino militar de 2ª clase de la ciudad de Almería a la de Motril”. La primera etapa va de la ciudad de Almería a Roquetas, para la que se estima un tiempo de recorrido de seis horas y cuarto. En la columna “Naturaleza del Camino”, indica “Las primeras cuatro horas son de camino carretero de subidas y bajadas. Los tres cuartos de hora siguientes, de herradura molesto, cuesta abajo la mayor parte, hasta el sitio de Aguas Dulces, y lo restante (hora y media, se deduce) llano”. En la columna de “Poblaciones, Caseríos y Cortijos que se encuentran…”, dice, en clara referencia al Fielato de Almería, “A la media hora de camino se halla una casita que sirve para resguardo de los Dependientes de Rentas de Rambla Honda, inmediata a la torre que fue volada por los ingleses. A las cinco horas, la torre de los Bajos, volada por los ingleses”.

Es descrito en parte por Simón de Rojas Clemente Rubio en su obra Viaje a Andalucía. Historia Natural del Reino de Granada (1804-1809).

El Camino Viejo aparece mencionado en la Memoria de los Caminos Vecinales de la Provincia de Almería, de Diputación de Almería, 1862, como Provincial: “es un camino de herradura formado a último del siglo pasado, de gran costo por ir falseando la vertiente meridional de la Sierra de Enix, ramal considerable de la de Gádor, con grandes muros de mampostería común y varias tageas y alcantarillas. En su ejecución no partieron de estudio alguno y de aquí sus continuas pendientes de un 12 por 100, sus muchas líneas de zig zag incómodas y peligrosas y su paso célebre llamado el Cañarete. Esta vía tiene solo unos 17 kilómetros y conduce al sitio llamado de Aguadulce, no llegando la jurisdicción de la capital más que al sitio llamado de la Garrofa, distante seis kilómetros”.

El trazado íntegro del Camino Viejo se contempla perfectamente en el Plano de Juan Ravina Eymar, 1864, planos Carretera Cañarete de 1868 del ICCP Rafael Levenfeld y planos catastrales de 1930 y anteriores de 1897 mandados formar por la Ley de 24 de agosto de 1896.

Las pistas del Camino Viejo serían conforme al perfil longitudinal del siglo XIX: el Puerto de Almería, el Barranco del Castillo, Barranco de la Venta, Barranco de las Adelfas, Barranco de la Cala de los Ahogados, Rambla de la Garrofa, Barranco del Lagarto, Barranco de la Cueva del Cura, Barranco del Salto, Barranco del Palmer, Barranco de la Maroma, Barranco del Paladín, Barranco del Cañarete, Fuente de Aguadulce, Barranco de la Zorra, Rambla Honda y Hortichuelas.

El Camino Viejo al Poniente al llegar a Roquetas costeando (por lo que hoy sería la Caña da Real de la Costa) se dirigía por el Camino Viejo de Dalías a lo que hoy es El Ejido y de aquí a Adra por la Cuesta de los Alacranes.

Ese Camino Viejo está actualmente interrumpido en varios puntos y secciones y parcialmente destruido, o con tramos muertos o transformado por acción de la Cantera de Poniente y del Puerto Deportivo, los túneles y trazado de la N-340 y la Autovía A-7, canalizaciones y asfaltado para vías de acceso de las Urbanizaciones Castell del Rey, La Garrofa y Espejo del Mar.

Batería Antiaérea de Bayana sobre el Puerto de la ciudad de Almería. Foto: Ginés Valera.

Restos de fundiciones y baterías de la Guerra Civil de 1936-39

A todo lo largo de este Camino Viejo, encontramos en su entorno interesantes y valiosos restos patrimoniales de chimeneas y galerías de condensación de fundiciones de plomo extraído de la Sierra de Gadór; restos de casas-cuevas magistralmente fotografiadas por Pérez Siquier; la torre del fielato, para el cobro de los arbitrios y tasas municipales sobre el tráfico de mercancías; la cantera de Poniente que suministró piedras para el dique de Poniente del Puerto con su trichera para cable áereo y montacargas, que mediante Decreto 224/2018, de 11 de diciembre se inscribió en el Catálogo del Patrimonio Histórico Andaluz como Bien de Interés Cultural, con la tipología de Monumento, las Canteras Monumentales de Almería; la Cantera del Alemán junto a Castell del Rey; aljibes y restos de Ventas Ramírez, del Palmer y la Garrofa, galería de agua y un ramal que conducía a los que en la actualidad es el Restaurante de la Gruta; Torre vigía de la Garrofa, del s. XVI

Fracasada de sublevación militar el 21/07/1936, en el inicio de la Guerra Civil Española, los militares insurrectos del Batallón de Ametralladoras a los que se unieron Falangistas serían apresados o ejecutados, permaneciendo Almería durante toda la Guerra leal a la República. Para disminuir el abastecimiento republicano, el crucero nacional Canarias bombardeó el 08/11/1936 los depósitos de combustible del Puerto en ausencia de defensa artillera.

La caída de Málaga en febrero de 1937 en manos del bando nacional, ametrallamientos en la “desbandá y la intención de contener el avance nacional hacia la base naval de Cartagena, precipitaron la construcción de un sistema defensivo con baterías de tierra (en Las Hortichuelas) y antiaéreas (Bayyana, Catedral, Alcazaba, mina de azufre de Benahadux…), defensa antisubmarina en el Andarax, refugios contra aeronaves, trincheras, casamatas de ametralladoras, aeródromos y puestos de observación en el litoral.

Para la defensa antiaérea se utilizaron en Almería ametralladoras antiaéreas de 47 mm y 7,7 mm, de marca Vickers y Hotchkiss, y cañones antiaéreos de 76,2 mm Vickers. Hay vestigios de 4 pequeños asentamientos de proyectores y barbetas (dos de 3,40 metros y otra de 2,80 metros) de baterías antiaéreas en el Camino Viejo de Almería, zona de Canteras de Bayyana junto al fielato, para proteger el Puerto y la ciudad y la batería de Punta de la Mona de ataques de bombarderos.

Batería de Costa de Punta de la Mona en el Camino Viejo. Foto: Ginés Valera.

La Comandancia de Artillería inició la fortificación de la Plaza con el emplazamiento en roca excavada de la batería de costa de Punta de la Mona a dos quilómetros de Almería junto al Camino Viejo con tres piezas de artillería reutilizadas de la marina: una Vickers de 120 mm y otras dos anticuadas de 101,6 mm, protegidas por una antiaérea de 76,2 mm. La Batería se estrenó disparando sin éxito por insuficiente alcance contra la escuadra alemana, formada por el acorazado Admiral Scheer y 4 torpederos, que bombardearon Almería el 31/05/1937 causando unos 31 muertos, como represalia por el ataque días antes de Tupolevs SB-2 al acorazado Deutschland en Ibiza, al “confundirlo” con el Canarias, falleciendo 24 marinos alemanes.

Fue inaplazable así el emplazamiento por la Comandancia Militar Exenta de Almería bajo dirección del TCOL de Ingenieros Tenllado Gallego, de una potente batería de costa con dos secciones: una en posición defensiva en Punta de la Testa (junto la carretera al faro de Cabo de Gata) compuesta de dos piezas de artillería Vickers de 15,24 centímetros, situadas a unos 250 metros una de la otra, modelo 1923, que hacían fuego cruzado con otra batería de costa gemela emplazada en Roquetas de Mar dotada también con dos Vickers idénticas situadas entre sí a 40 metros y a 300 metros de la costa. Se presupuestaron en mayo del 37, 134.500 pesetas. Cada sección alcanzaba 21 quilómetros y disparaban proyectiles de 45,36 quilos, con una cadencia de 4 disparos/ minuto, de modo que todo barco que entraba en la Bahía podía ya ser batido por alguno de los cuatro cañones.

Muro de contención del arranque del Camino Viejo del XVIII por Barranco Greppi.

Puentes y pontones del Camino Viejo

En el tramo comprendido entre Barranco Greppi y el Barranco el Cañarete del Camino Viejo se localizan el monumental Puente de Bayyana, tres arranques de puentes hoy desaparecidos (bien por fuerza del aluvión y de las aguas o mejor por obra humana para ensanchar las vías y radio de las curvas de acceso a las urbanizaciones) y otros 4 pontones de fábrica de mampostería de menor dimensión, algunos cubiertos por relleno y asfalto. Entre ellos destacan el Puente de la Garrofa (con rasante inclinada en dos vertientes, luz libre, 4,60 metros; longitud total, 41,50 metros; anchura tablero 5,20 metros y altura máxima rasante, 9,40 metros) en el Municipio de Almería y el Puente del Palmer en el Municipio de Enix (luz libre, 5,20 metros; longitud total, 55 metros; anchura tablero 5,20 mts y altura máxima rasante, 7,60 metros, con mampostería algo enfoscada). Estos dos últimos puentes tiene en común que son tipo bóveda de cañón de mampostería, un solo vano, con tímpanos y estribos de mampostería de dolomías; imposta para arranque del arco y largo muro de acceso.

El Puente de Bayyana de autor y plano hoy desconocidos (si bien nos recuerda un poco las fortificaciones en Almería del Ingeniero Millitar Felipe Crame que intervino en el cercano Castillo de San Telmo) ha sido datado por algunos entre 1776 y 1797 aproximadamente, siglo XVIII, reinando Carlos III. Es citado por el Diccionario Geográfico-Estadístico-Histórico de España y sus Provincial de Ultramar, por Pascual Madoz, 1845-1850.

Puentes del Camino Viejo. Fotos: Ginés Valera.

Google Earth fija su localización: 36º49´50″N 2º29¨35″W, coordenadas: 5455; 40763. A unos 150 metros aguas arriba del punto kilométrico. 100, 500 de la Carretera Nacional 340, detrás de la Estación de Servicio Bayyana y Restaurante que instaló Ramón Gómez Vivancos al demoler la Venta Nueva Ramírez, próximo al faro de San Telmo en el Municipio de Almería e inicio de la ruta PR-A 120 a Enix por el interior.

Localización: Polígono 2 Parcela 90020 | Referencia catastral: 04900A002900200000QA

En cuanto a sus dimensiones decir que según su ficha del Inventario es un puente bípedo tipo bóveda, solo tiene un vano, 29,20 metros de altura sobre rasante del cauce de la rambla, una longitud total 102 metros, anchura de tablero de 4, 80 metros y luz libre de 5,40 metros, con apartaderos en sus extremos para facilitar que un carro no se cruzara con otro por insuficiente anchura.

Actualmente está fuera de uso al ser mutilada por los túneles de la Autovía A-7 la sección que bajaba desde la actual Cantera de Poniente declarada BIC, pues ahora se utilizan para el tráfico rodado el Puente de la N-340 de 5 bóvedas (aguas abajo) y el Viaducto de la A-7 (aguas arriba). La fábrica de la bóveda, los tímpanos y estribos es de sillería.

Ha sufrido diversas reparaciones posteriores (o elevación), por ejemplo: los tímpanos se han rehecho con técnica constructiva de mampostería, quizás rocas dolomías extraídas de canteras de la zona (hoy Cantera del Alemán en Castell del Rey). No tiene más ornato que una cornisa horizontal a 19 metros de la parte superior del puente en toda su longitud, que separa en dos cuerpos al puente. En su parte central, encontramos las dovelas y bóveda de cañón hecha en fábrica de sillares regulares de caliza ocre/amarilla talladas en cantera de las estribaciones de la Sierra de Gádor algo erosionada por el paso del tiempo y de las aguas pluviales, con boquilla separada de la bóveda.

Tiene el tablero una rasante en dos vertientes con vértice descentrado respecto de la clave del arco, con restos de reciente vertido de cemento y postes de madera de tendido telefónico hoy abandonado. Los estribos ataluzados transversalmente, el pretil de sillería y mampostería con algún desprendiemiento y en la imposta del puente salta a la vista que se utilizó mortero de cal y relleno para unir los sillares y que las juntas no son demasiado regulares. La cimentación es escalonada y con forma de prisma trapezoidal en su base y las primeras hiladas del sillarejo en parte se asientan aprovechando un lecho de roca del cauce de la rambla o losa de mortero o cemento para soportar mejor el empuje.