El presidente de Cajamar, Eduardo Baamonde, ante la Asamblea General Ordinaria de Delegados celebrada esta mañana, ha expuesto como principal elemento diferenciador de la entidad su especialización agroalimentaria, destacando la apuesta de Cajamar por la economía productiva y sostenible, basada en el conocimiento, la innovación y socialmente responsable.
En el transcurso de su intervención el presidente de Cajamar ha valorado los aspectos más relevantes de la actividad económica y del desempeño social de la entidad, así como las previsiones y principales planes previstos para el presente ejercicio. “Debemos seguir creciendo, a nuestro ritmo, aprovechando nuestras fortalezas y la singularidad y diferenciación que nos proporciona ser la única banca cooperativa española en el grupo de entidades significativas bajo supervisión del MUS”, ha dicho.
En este sentido, Eduardo Baamonde ha señalado que la evolución de la entidad es muy positiva en su fortalecimiento y expansión, a pesar de la coyuntura económico-financiera condicionada por el mantenimiento de los bajos tipos de interés, la existencia de incertidumbres políticas globales y el inicio de una desaceleración económica que empezó a evidenciarse a partir del segundo semestre de 2018. “Hemos conseguido mejorar nuestra solvencia, disminuido nuestro activo irregular, incrementado nuestra inversión crediticia sana, así como los recursos gestionados. Y hemos construido una cuenta de resultados sólida y sostenible, gracias a un modelo de negocio responsable y especializado, que no solo atiende las necesidades de financiación, ahorro e inversión de nuestros clientes, sino que genera los recursos necesarios para seguir cumpliendo con su misión como banca cooperativa de referencia en España, lo que evidencia nuestra capacidad de adaptación a un entorno complejo y un mercado extremadamente competitivo, a la vez que damos respuesta a los exigentes requerimientos del regulador”, ha resumido.
En lo que se refiere a la ampliación y reequilibrio territorial de la red de oficinas, el presidente de Cajamar ha anunciado la próxima apertura de 7 nuevas oficinas en Galicia, Asturias y Extremadura, tras las 4 oficinas abiertas en 2018 en Barbastro (Huesca), Ejea de los Caballeros (Zaragoza), Carmona (Sevilla) y Mutxamel (Alicante). Asimismo, ha dado a conocer la entrada en funcionamiento, a primeros de mayo, de dos nuevas oficinas itinerantes, que se suman a los cuatro vehículos existentes actualmente en la Comunidad Valenciana y Andalucía oriental, para dar servicio a 38 pequeñas poblaciones de entre 170 y 1.500 habitantes, contribuyendo así a evitar la exclusión financiera a los habitantes de estas zonas rurales poco pobladas.
Cajamar cerró el ejercicio 2018 con 3,4 millones de clientes, de los que más de 1,5 millones tienen una alta vinculación, siendo de estos el 47 % clientes digitales, un 11 % más que el año anterior, incremento que alcanza un 61 % en usuarios de banca móvil.
En lo que respecta al desempeño social, que se canaliza con los recursos del Fondo de Educación y Promoción, la actividad de Cajamar se ha centrado un año más en la investigación y transferencia de conocimiento dirigida especialmente al sector agroalimentario. Una labor que se realiza desde los centros experimentales de la Fundación Cajamar en Las Palmerillas (Almería) y Paiporta (Valencia), que en 2018 recibieron a 3.249 visitantes y a través de los cuales se organizaron 103 actividades en toda España en las que participaron 9.164 personas, orientadas fundamentalmente a la mejora de la gestión y gobernanza de empresas.
Asimismo, el presidente de Cajamar ha referido las publicaciones especializadas realizadas este año, y los distintos convenios suscritos con universidades y centros tecnológicos para atender las necesidades y demandas de las empresas, dedicando una mención especial a la incubadora de empresas de alta tecnología en el uso y gestión sostenible del agua, promovida por la entidad y que ha iniciado su andadura este año. “Esta iniciativa pone de manifiesto nuestra contribución ante uno de los factores más limitantes para el futuro del sector agroalimentario español, y tiene por objeto la promoción y ejecución de proyectos innovadores relacionados con la obtención y uso eficiente del agua, en respuesta a una de las principales preocupaciones de nuestros clientes agroalimentarios, lo que pone de manifiesto nuestro compromiso y firme voluntad de contribuir al desarrollo sostenible de este sector”, ha explicado.
Antes de terminar su intervención ante la Asamblea General de Cajamar, Eduardo Baamonde ha recordado también que este año se cumple el décimo aniversario de la constitución del Grupo Cooperativo Cajamar y de su primer sistema institucional de protección asociado, grupo consolidable que constituye una estructura de integración singular y pionera en la banca cooperativa europea, al que posteriormente han ido adhiriéndose más cajas hasta alcanzar su configuración actual. “Diez años después, no solo estamos entre las entidades que han sido capaces de superar una crisis económica y financiera sin precedentes, sino que ahora somos más grandes como resultado de nuestro propio crecimiento orgánico y de haber liderado en estos años el mayor proceso de concentración realizado en cuanto a número de entidades se refiere (26), lo que nos ha convertido en el grupo financiero de referencia de la banca cooperativa de nuestro país y nos ha llevado a situarnos entre las 12 entidades financieras significativas bajo supervisión del MUS; y todo ello sin haber recibido ayudas públicas, únicamente con nuestros propios recursos y nuestro esfuerzo”, ha concluido.
Negocio y cuenta de resultados
Por su parte, el director general, Francisco González ha presentado las magnitudes del negocio y de la cuenta de resultados obtenidas en 2018, subrayando que se han cumplido todos los objetivos propuestos en cuanto a captación de recursos, saneamiento del balance, gestión del activo irregular, mejora de la eficiencia operativa e impulso de la multicanalidad.
La cuenta de resultados individual de Cajamar, gracias al empuje del negocio, eleva todos los márgenes respecto al año anterior, con un crecimiento del resultado neto del 29,9 %, gracias al aumento de los ingresos recurrentes, la optimización de los gastos de explotación y la mejora de la eficiencia.
El margen de intereses inicia una nueva senda de crecimiento interanual hasta los 465,6 millones, un 3,6 % más, inducido por el aumento de la inversión crediticia bruta y el ahorro de costes financieros. Por otro lado, la combinación del incremento de los ingresos brutos con el control exhaustivo del gasto derivado de la implantación de nuevos sistemas de optimización de costes, ha facilitado que el margen bruto aporte a la cuenta de resultados 654,6 millones de euros, siendo de destacar el descenso de los gastos de explotación del 7,1 % que contribuye a una mejora de 7,4 puntos en la eficiencia.
Tras provisiones e impuestos, el resultado neto del ejercicio individual de Cajamar asciende a 65,5 millones de euros, 15 millones más que el ejercicio precedente, lo que fortalece los recursos propios de la entidad, garantiza la retribución a los socios y aumenta la contribución al Fondo de Formación y Promoción Cooperativa.
En relación al capital social, en 2018 se han incorporado a la cooperativa de crédito 6.074 nuevos socios, con lo que Cajamar cuenta con el apoyo y la confianza de 1.331.255 socios, cuyo capital social aportado asciende a 2.639 millones de euros, tras un incremento del 6,5 % en 2018.
Y respecto a la evolución de la red de oficinas y empleados, al cierre del ejercicio Cajamar cuenta con una plantilla de 4.295 profesionales y 949 oficinas, y que sumadas las ventanillas, agentes financieros y oficinas itinerantes hacen un total de 1.067 puntos de atención y asesoramiento a clientes, de los que 351 (32,9 %) están en localidades de menos de 5.000 habitantes, 126 (11,8 %) entre 5.000 y 10.000 habitantes, 103 (9,7 %) entre 10.000 y 20.000 habitantes, y 487 (45,6 %) en ciudades de más de 20.000 habitantes.
Francisco González, ha finalizado su presentación del informe de gestión señalando que los resultados obtenidos cumplen, e incluso superan, las previsiones contempladas en el Plan Estratégico 2018-2020: “Seguimos construyendo una entidad cada día mejor y más fuerte, reafirmada en los valores de la banca cooperativa y avanzada en innovación tecnológica, calidad en el servicio y experiencia de cliente; una entidad que está implementando un nuevo modelo de asesoramiento y atención comercial, tanto en la red de oficinas como a través de los canales digitales; que cuenta con un equipo profesional competente, en continua formación y actualización; y que está siendo reconocida globalmente por nuestra responsabilidad social y acciones a favor de la sostenibilidad y la igualdad, y prácticas de reporte y transparencia”.
Una vez conocida la evolución del ejercicio, la Asamblea General de Cajamar ha dado su aprobación al informe de gestión y cuentas anuales individuales, así como a la distribución de excedentes disponibles y las líneas básicas sobre destino y aplicación del Fondo de Educación y Promoción.
Asimismo, los 250 delegados que han asistido en representación de los 1,4 millones de socios de la entidad, han aprobado las demás propuestas sometidas a su consideración por el Consejo Rector, entre ellas la modificación del Contrato Regulador del Grupo Cooperativo Cajamar y de los Estatutos Sociales de la entidad para su adaptación al nuevo marco de resolución europeo y adecuación a requerimientos supervisores.