Representantes del proyecto europeo de turismo ecuestre ‘Equus-Rutes de Turisme Eqüestre per Europa’, en el que participan la Diputación de Barcelona y ocho socios de seis países de Europa, visitaron la semana pasada el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar para conocer una experiencia de éxito ecuestre en Andalucía. El objetivo de este proyecto es el desarrollo de herramientas de apoyo a los grupos interesados en la creación de rutas de turismo a caballo, así como el impulso de plataformas para mejorar la comercialización de productos turísticos ecuestres en Europa.
Los representantes de ‘Equus’, con la colaboración de la empresa Cabacci -sociedad con más de 25 años de experiencia-, han conocido cómo se gestiona un producto turístico en auge en todo el mundo. Durante su visita, han recorrido a caballo las playas y entornos más emblemáticos del espacio natural, siguiendo la ‘Ruta de las playas vírgenes’ (que va desde la barriada de San José hasta las salinas de Cabo de Gata, pasando por Mónsul, Genoveses, Media Luna,Vela Blanca, Arrecife de las Sirenas y el faro de Cabo de Gata), y la ‘Ruta de los piratas’. Asimismo, han conocido algunos de los Equipamientos de Uso Público que la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio tiene a disposición de los visitantes del Parque, como la Casa de los Volcanes y el Jardín Botánico, y han visitado las barriadas nijareñas de Boca de los Frailes, La Isleta del Moro, Rodalquilar, Las Negras, Fernán Pérez, y Los Albaricoques.
El turismo ecuestre, aún incipiente en el Parque Natural, cuenta en toda Europa con 6 millones de adeptos (20 millones en todo el mundo) y es un mercado potencial al que las empresas del Parque Natural pretenden llegar, especialmente a los practicantes de Francia, Alemania y Reino Unido, principales demandantes de este tipo de producto turístico, que suelen ser personas de poder adquisitivo medio-alto, que buscan territorios que preservan su identidad, y cuyas estancias oscilan entres 5 y 7 noches. En España hay 32 itinerarios señalizados para la práctica ecuestre, con 1.200 kilómetros en total, para los que se ha realizado una inversión de unos 450.000 euros en infraestructuras.