¿Quiere conocer a fondo la provincia de Almería? ¿Desea adentrarse en un análisis del medio físico, de la sociedad y de la economía de una forma amena, divertida y al mismo tiempo rigurosa? Pues a partir del 22 de diciembre lo podrá hacer gracias al ‘Atlas Geográfico de la Provincia de Almería’, un volumen que se convertirá en un título de referencia en colegios e institutos cuando se trate de conocer todos los aspectos más destacados de la estructura de la provincia.
El ‘Atlas Geográfico de la Provincia de Almería’ realiza un amplio estudio del medio físico, de la sociedad y de la economía almerienses, con datos actualizados hasta 2008 y que presentan cómo ha evolucionado Almería hasta llegar a ser una de las provincias con mayor renta per cápita del país.
El trabajo, dirigido por Andrés García Lorca, y coordinado por Alfonso Viciana y Jesús Rodríguez, se pondrá a la venta coincidiendo con los primeros compases de esta navidad, y será editado por el Instituto de Estudios Almerienses.
En esta obra, que como aseguran sus autores será de un uso habitual en centros de enseñanza, se vierten datos que muestran cómo ha cambiado la sociedad almeriense desde la segunda mitad del siglo XIX, cuando la provincia vivió un momento muy dulce asociado a la industria minera, hasta los primeros años del siglo XXI en que la presencia de la población inmigrante llegada de otros países representa un porcentaje muy a tener en cuenta.
El ‘Atlas Geográfico de la Provincia de Almería’ está estructurado tres bloques, como son el medio físico, la sociedad y la economía de la provincia. Uno de los atractivos más interesantes de esta publicación será la colección de mapas sobre la provincia y la cantidad de fotografías que se han incluido. De hecho, el volumen se acompaña de un cedé con todos los mapas utilizados en el Atlas.
Este aspecto tan visual le aporta un carácter divulgativo que sus autores han perseguido desde el primer momento. La idea es presentar un trabajo que cale en la población, que sea una herramienta de trabajo habitual para los escolares de la provincia y que resulte atractiva. El Atlas presenta varias lecturas, permite que quienes que sólo buscan conocer la provincia sin muchas pretensiones científicas obtengan una buena visión de la misma a través de los mapas y los gráficos contenidos en él. Pero además también se presta a un análisis más profundo de la provincia, porque el rigor se ha mantenido a lo largo de toda la obra.
En este sentido entra la labor de los geógrafos que han preparado la publicación. A través de un conjunto de mapas, gráficos y fotografías presentan una explicación científica de las realidades presentadas en las imágenes, muy útiles para tener una visión de conjunto de cómo es la provincia de Almería y cómo era hace algo más de cien años.
El apartado de imágenes se completa con una sección muy curiosa dedicada a conocer cómo se ve Almería desde el espacio, con imágenes tomadas por satélite y en las que se aprecian a la perfección los invernaderos del Poniente, única obra humana junto a la Muralla China que a simple vista se aprecia desde el espacio. Y esta sección se completa con una serie de imágenes aún más curiosa dedicada al cielo que se puede ver desde Almería, con fotografías que explican las constelaciones que se pueden observar desde la provincia, así como un apartado en el que se explica cómo orientarse con la ayuda de las estrellas.
El capítulo dedicado al medio físico analiza la estructura de la provincia. La geología, la geomorfología y la climatología de la provincia son estudiadas con rigor en esta obra, en la que se aportan datos tan interesantes como que los principales ríos de la provincia como el Andarax, el río Adra y el río Almanzora eran estuarios en la parte final de su curso y permitían la navegación hasta hace unos seis mil años. En cuanto a la climatología, esta obra realiza un seguimiento de las temperaturas y de las precipitaciones registradas en Almería desde hace unos cincuenta años y destaca un descenso medio en el número de precipitaciones registradas, mientras que las temperaturas se han mantenido en los mismos parámetros. Sin embargo, Alfonso Viciana afirma que con estos datos no se puede analizar el cambio climático por que sólo corresponden a un periodo muy corto de tiempo en el que sólo se pueden apreciar ciclos.
Este capítulo también ha reservado un espacio dedicado al litoral, del que analizan su evolución y cambios registrados a lo largo de los diferentes periodos, protagonizados por la erosión y la acción humana. También tienen cabida los diferentes espacios naturales protegidos de la provincia, de los que se hace una precisa descripción, al tiempo que se analizan las diferentes figuras de protección existentes en Almería.
La descripción de la sociedad almeriense ocupa el segundo capítulo del Atlas. En esta parte, los expertos analizan la evolución de la población desde mediados del siglo XIX hasta la actualidad, con datos de hasta 2008. Entre las conclusiones a la que lleva el estudio, uno de los datos más impactantes es que el 47 por ciento de los nuevos nacimientos registrados en los últimos años en la provincia de Almería son hijos de inmigrantes, un dato a tener en cuenta de cara a conocer cómo será la población almeriense dentro de unos años. El Atlas también arroja información sobre el crecimiento de la población almeriense y destaca que cada 62 minutos nace un nuevo ciudadano de la provincia.
En el Atlas se ve la curva poblacional de Almería. El análisis parte con datos de la segunda mitad del siglo XIX con la explosión del sector minero. En esos años, la población almeriense era muy elevada, tanto que municipios como Cuevas del Almanzora contaba con una población cercana a los 26.000 habitantes, una cifra que duplica el número de habitantes que actualmente tiene el municipio.
Como recoge el Atlas, tras esta época de bonanza en cuanto a número de habitantes llegó la etapa en la que muchos almerienses partieron a Cataluña y a otros puntos de Europa en busca de un futuro mejor, y se localiza después de la Guerra Civil. Tras este periodo de emigración llegó el trabajo del Instituto Nacional de Colonización con la repoblación del Campo de Dalías, la Comarca de Níjar y la de Huércal Overa en los años sesenta. Esta repoblación estuvo asociada a la creación de nuevos núcleos y la implantación de la agricultura bajo plástico, que revirtió la tendencia de la provincia hasta convertirla en receptora de emigrantes. Además, este fenómeno estuvo asociado al vaciamiento de las zonas de interior y la explosión poblacional registrada en el litoral. Los datos sobre población llegan hasta 2008 y reflejan el efecto de la actual crisis económica, con datos como la pérdida de población el año pasado registrada por Roquetas de Mar.
El tercer capítulo del Atlas está dedicado a la economía de la provincia. En este bloque se presenta la importancia que tuvo el sector minero y el impacto que supuso prácticamente a lo largo de toda la geografía almeriense hasta los primeros años del siglo XX. Además, también se detiene en las otras fuentes económicas de la provincia antes de la llegada de la agricultura intensiva, como fueron la producción de esparto y la uva.
Más centrado en la actualidad, el Atlas recoge los orígenes de lo que se conoció como “milagro almeriense” fruto de la industria de la agricultura bajo plástico y todos los sectores que lleva asociados. Además, en el apartado de la economía actual también se dedica un espacio a la segunda fuente económica como es la producción de mármol. Sobre ella, el volumen recoge su expansión y la actual crisis asociada a la caída de la construcción. El turismo es otro de los bloques que quedan a analizados en el capítulo dedicado a la economía almeriense, con especial dedicación a los principales destinos de la provincia. La pesca también protagoniza un apartado dentro del capítulo de economía, donde se destaca la crisis del sector asociada a una flota obsoleta y la sobreexplotación de los bancos pesqueros.
Alfonso Viciana reconoce que muchos de los datos contenidos en el ‘Atlas Geográfico de la Provincia de Almería’ se quedará obsoletos en no mucho tiempo, sobre todo los asociados a la sociedad o economía, sin embargo son un punto de referencia para cualquier estudio sobre la provincia de Almería.
Entre las fuentes empleadas para la elaboración del Atlas están prácticamente todos los institutos estadísticos con datos sobre Almería como la Cámara de Comercio o el Instituto de Estadística de Andalucía; o el Instituto Cartográfico de Cataluña, que ha cedido mapas de los primeros años del siglo XX.
Entre los colaboradores figuran los fotógrafos Carlos Pérez Siquier, David Méndez Miras o José Manuel Miralles, entre otros. También han participado Alfonso Ruiz, Andrés Sánchez Picón, Rodolfo Caparrós, Raúl Pérez o Daniel Morata. El responsable de la maquetación y el diseño ha sido Ignacio Sánchez-Gay.